_
_
_
_
EL PROCESO DE PAZ

El PSOE teme que el Gobierno "técnico" de Ibarretxe delegue la política en EH

Javier Casqueiro

La primera Comisión Permanente del PSOE de 1999 se volcó ayer en analizar la situación política en Euskadi. La dirección socialista ve con mucha "preocupación" el escenario vasco y en especial los últimos pronunciamientos del nuevo lehendakari, Juan José Ibarretxe. Los socialistas temen que el Ejecutivo de perfil "técnico" de Ibarretxe haya dejado la política en manos de la coalición radical Euskal Herritarrok. El PSOE acusó así a Ibarretxe de radicalizarse por la senda nacionalista de EH plasmada en la Declaración de Lizarra.

Más información
Caminos de paz
Las proezas de Aznar y los poros de Anguita

Aunque la primera Comisión Permanente del PSOE del nuevo año incluyó más asuntos en el orden del día, el debate real más extenso se centró en el proceso de paz del País Vasco. Tras el examen de los últimos acontecimientos, los dirigentes socialistas constatan "sin dramatismos" su gran preocupación. A la dirección del PSOE no le ha parecido nada "satisfactorio" el segundo comunicado de ETA en el que se ofrecía como "interlocutor político" del Gobierno en esta nueva fase tras la tregua anunciada en septiembre. El PSOE insiste en que con los terroristas no hay nada que negociar ni dialogar.Al PSOE tampoco le ha gustado el mensaje de Ibarretxe en su sesión de investidura. El portavoz de la dirección socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, mostró su desaliento ante el cariz nacionalista y poco plural del nuevo Ejecutivo vasco y, sobre todo, ante el peso creciente en el mismo de EH. Pérez Rubalcaba entiende que la calificación como Ejecutivo de perfil "técnico" del propio Ibarretxe "acentúa" esa preocupación. El PSOE intuye tras esa definición, y después de escuchar a los portavoces del PNV y de EH, Joseba Egibar y Arnaldo Otegi, que el Gobierno vasco se conducirá hacia un nacionalismo más radical en sintonía con la Declaración de Lizarra. El PSOE concluye que en Euskadi "la política se hará fuera del Gobierno y ahí manda EH".

Esa exacerbación nacionalista trae consigo, según el PSOE, "un incremento de la tensión social" como se comprobó con los abucheos que recibieron los parlamentarios del PP y del PSOE en la sesión de investidura. Los socialistas han observado intranquilos la equiparación "odiosa" de Ibarretxe entre los actos de "violencia de baja intensidad" provocados por el entorno radical y la política penitenciaria del Gobierno.

El PSOE rechaza esa comparación, apoya la política penitenciaria del Gobierno del PP y recuerda a Ibarretxe que "ha dado por muerto demasiado deprisa el Pacto de Ajuria Enea". Rubalcaba exige a Ibarretxe que revise y medite esa decisión porque el PSOE mantiene que mientras persista la violencia, cualquier violencia, no se puede pasar del vigente Pacto de Ajuria Enea a otro pacto, mesa o acuerdo de negociación. Esta advertencia no significa que el PSOE se niegue a entrar en una futura nueva mesa de paz en Euskadi, como la que persigue Ibarretxe. Es sólo un aviso a tomar más en consideración si la violencia continúa y si EH, y su portavoz, Arnaldo Otegi, sigue sin condenar "taxativamente y tajantemente la violencia". Para el PSOE, EH no es "todavía" un partido democrático.

Alfredo Pérez Rubalcaba formuló a continuación un ataque contra el Gobierno del PP. El portavoz socialista indicó que el Ejecutivo que preside José María Aznar no quiere enterarse de nada de lo que ocurre en Euskadi. Y sustentó esa acusación en la contradicción de que el candidato del PP vasco, Carlos Iturgaiz, se exprese con máxima dureza contra la Declaración de Lizarra, el PNV y EH, mientras en Madrid su partido sostiene una "esquizoide" alianza parlamentaria ("con cheques bajo cuerda entre Francisco Álvarez Cascos y Anasagasti") para los Presupuestos de 1999.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_