El contrato de sustitución, principal punto del primer acuerdo vasco por el empleo

Los sindicatos ELA, LAB, CCOO y UGT y la patronal Confebask aparcaron ayer sus diferencias y alcanzaron el primer acuerdo vasco por el empleo. El contrato de sustitución, que prevé la prejubilación de trabajadores mayores de 60 años y su reemplazo por jóvenes desempleados, es el principal punto del acuerdo, que contempla también la eliminación de las horas extraordinarias y la equiparación a los convenios de los trabajadores contratados a través de empresas de trabajo temporal (ETT). El acuerdo llega después de más de un año de negociaciones en el seno del Consejo de Relaciones Laborales (CRL) y rompe la tradicional división sindical vasca entre las centrales nacionalistas ELA y LAB y las de ámbito estatal. Tras 13 meses de acusaciones mutuas, patronal y sindicatos optaron por reuniones bilaterales que, según reconocieron ambas partes, han posibilitado alcanzar un acuerdo que será ratificado el próximo día 14.

Confebask y las centrales coincidieron en destacar la importancia del acuerdo, que calificaron de "hito en el proceso de negociación colectiva del país". El pacto, sin embargo, deja algunos flecos y posterga para febrero la negociación sobre el tiempo de trabajo, uno de los principales escollos del debate en el CRL. Mientras las centrales reivindican la jornada laboral de 35 horas, Confebask sólo está dispuesta a negociar la reordenación, que no reducción, del tiempo de trabajo.

El contrato de sustitución acordado contempla la prejubilación de los trabajadores mayores de 60 años, que percibirán como mínimo un 85% de su salario neto y su relevo por jóvenes parados que serán contratados con carácter indefinido. El Gobierno vasco y los empresarios financiarán esta nueva modalidad de contrato, en unos porcentajes que sindicatos, patronal y el Departamento de Trabajo acordarán próximamente.

El primer acuerdo vasco por el empleo establece también la eliminación de las horas extraordinarias, salvo en los casos de falta de mano de obra especializada y de tiempos muy cortos. Las centrales han logrado pactar también limitaciones para las empresas de trabajo temporal y de servicios. El acuerdo fija, en el caso de los trabajadores contratados a través de ETT, la equiparación salarial con los convenios sectoriales, un tema que será aplicado en el resto de España en el año 2.000.