Arzalluz: "Hay delitos políticos porque la justicia toma medidas políticas"

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, consideró el jueves que la salida de la cárcel de José Barrionuevo y Rafael Vera deteriora la imagen de la justicia. "Se ha demostrado", dijo, "que en este país hay delitos políticos porque la justicia toma medidas políticas". Según el líder nacionalista vasco, la recomendación de un indulto parcial realizada por el Tribunal Supremo tiene más trascendencia que la propia decisión del Gobierno al respecto.

"Perplejo" y "bastante atónito". Con estos calificativos definió Xabier Arzalluz, en declaraciones a Radio Euskadi, su estado de ánimo tras "el incumplimiento" de la sentencia del juicio por el secuestro de Segundo Marey, lo que prueba que existen "distintas varas de medir".Arzalluz consideró "muy malo" que se haya concedido un indulto de dos tercios de sus penas a los condenados del caso GAL porque, en su opinión, ello supone que los tribunales han adoptado una medida "política". En ese sentido, anunció que el PNV efectuará una valoración técnica de "las graves irregularidades" que puedan haberse cometido en este asunto.

El líder nacionalista vasco aseguró que le da "igual" que, como compensación, haya "gestos hacia el otro lado", en alusión al acercamiento de los presos etarras a Euskadi. Así, apuntó que resoluciones como la que se ha tomado esta semana cuestionan la participación de los partidos mayoritarios, por el PP y el PSOE, en la elección de los magistrados de los altos tribunales.

La concesión del indulto parcial por parte del Gobierno que preside José María Aznar, prosiguió, tiene "un punto sarcástico: que los dobermans [los socialistas tildaron con ese apelativo a los populares durante la campaña de las elecciones generales de 1996] se permitan el lujo de indultar a quienes se consideran a sí mismos demócratas de toda la vida".

Ante la "intolerable" situación creada, enfatizó Arzalluz, el PNV "ya no puede quedarse en la mera condena verbal". "Presionar el Ejecutivo [central] es inútil" de todos modos, concluyó, "porque depende de sus intereses internos y tan sólo mira del Ebro hacia abajo".

A su vez, Juan María Atutxa, ex consejero vasco de Interior y nuevo presidente del Parlamento de Vitoria, manifestó en la Cadena SER que "las urgencias" del Gobierno al tramitar el indulto "pueden provocar la lectura de una aplicación discriminativa de la propia justicia y de la propia política". Sin embargo, matizó, ese hecho tendría una importancia relativa si se inscribiera verdaderamente dentro del proceso de reconciliación y se diera a otras personas, los reclusos etarras, un tratamiento similar "para ir cicatrizando las heridas".

Eusko Alkartasuna, a través de su senadora Inmaculada Boneta, estimó "intolerable" la actitud "chulesca" con la que, en su criterio, Barrionuevo y Vera salieron de la cárcel. Han seguido en su línea "de montar un circo", dijo, en vez de abandonar el centro penitenciario "de manera digna".

Rosa Aguilar, portavoz parlamentaria de IU, reiteró que "no deja de ser sorprendente que, a estas alturas, no hayan mostrado arrepentimiento". "Ambos deberían pedir perdón a la sociedad por una página negra en la historia de España que no nos merecemos", agregó. A su vez, el líder de su organización, Julio Anguita, ironizó: "Ya no se puede exigir el arrepentimiento a ningún recluso que solicite su indulto".

"El Gobierno", insistió Aguilar, "tendrá que explicar las razones para haberles dado ese trato de provilegio; si es que ha habido un acuerdo político y si esto es la antesala de otras medidas que puede tomar con presos de HB y ETA".

Patxi Zabaleta, diputado navarro de HB, recordó precisamente que éstas son las segundas Navidades que los anteriores dirigentes de la coalición independentista pasan en la cárcel.

A su entender, todo lo relacionado con el juicio del caso Marey y el posterior indulto "no ha sido más que una pantomima para la opinión pública". "¿Cuándo se ha visto que se tramite un indulto antes de que una sentencia, aunque sea firme por ser del Supremo, sea definitiva?". "¿Es que alguien tenía prisa para que Barrionuevo y Vera no se pusieran nerviosos?", se preguntó con ironía.

Por el contrario, el ex etarra Mikel Sueskun insistió en que la determinación del Gobierno supone "un paso más hacia la paz".