UGT se descuelga de los paros en Renfe durante diciembre para negociar
El sindicato UGT ha decidido aplazar la convocatoria de paros parciales en Renfe que llevaba a cabo desde el pasado día 21 junto a CCOO y CGT y aceptar el llamamiento de la empresa para negociar el aumento de las primas que perciben los empleados y la reclasificación de categorías laborales. Comisiones Obreras y CGT mantienen los paros de cuatro horas por cada turno los días 28 y 30. La huelga de 24 horas prevista del 7 al 8 de enero también se mantiene, y a la misma sí se adhiere UGT.
Este sindicato advierte además que, si las conversaciones no dan algún fruto antes del 5 de enero, convocará huelgas de 24 horas los días 22 de enero y 5 de febrero.Según un comunicado hecho público por UGT, que cuenta con cuatro representantes en el comité de empresa, por cinco de CC OO, dos de CGT y dos del sindicato de maquinistas SEMAF, la dirección de Renfe ha aceptado iniciar negociaciones para "adecuar las primas mínimas de todos los trabajadores, empezando por las categorías que tienen las primas más bajas", concluyendo las negociaciones en dos meses.
Según manifestó la empresa en días pasados, las reivindicaciones expuestas por los sindicatos suponen un desembolso "inasumible" de 3.800 millones de pesetas. De acuerdo con la nota hecha pública por la compañía, la empresa propone ahora "llegar a un acuerdo en las categorías con pluses de productividad más pequeños en un plazo inferior a dos meses". Renfe no ha cifrado cuánto podría suponer dicha negociación. La empresa propone también "que el proceso de revisión de las primas salariales se desvincule de la reclasificación de categorías laborales, que deberá ser abordada en el marco del próximo convenio colectivo".
Reflexión
La compañía destaca asimismo la decisión tomada por el sindicato UGT "tras un ejercicio de reflexión riguroso acerca del alcance de la huelga y el daño que produce a los ciudadanos en estas fechas", y cifra el seguimiento de los paros de los días 21 y 23 de diciembre, en una empresa con un nivel de afiliación del 73%, en tan sólo el 13%.El "descuelgue" del sindicato UGT de las protestas convocadas en la mayor empresa pública del país ahonda en la progresiva separación de estrategias entre el sindicato que dirige Cándido Méndez y el que dirige Antonio Gutiérrez.
Ambas centrales han mostrado profundas discrepancias en sectores como la banca y las cajas de ahorro, que culminaron en posiciones radicalmente distintas en la negociación de los nuevos contratos a tiempo parcial con el Gobierno. Comisiones apoyó y firmó el acuerdo con el Ministerio de Trabajo, mientras que UGT lo rechazó y dio por concluido el proceso de diálogo social.
Las discrepancias en Renfe hacen presumir una agitada negociación del próximo convenio colectivo en la compañía, que afecta a 36.000 empleados.
Todas las fuerzas sindicales de la empresa ferroviaria han cuestionado el proceso de subcontratación que lleva a cabo la compañía que preside Miguel Corsini al considerar que conduce a la privatización.
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