Los alcaldes del Baix Llobregat piden al Ministerio de Fomento la reapertura de la A-16

El clamor contra la manera como ha sido cortada al tráfico en Sant Boi la autopista A-16 para concluir las obras de la pata sur y los problemas de circulación que ha provocado podrían llevar al Ministerio de Fomento a reconsiderar su postura. Los alcaldes de las poblaciones del Baix Llobregat afectadas hicieron llegar ayer su malestar a los responsables de Fomento y la necesidad de reabrir, siquiera parcialmente, el tráfico en la A-16, aunque ello conlleve que la pata sur no esté acabada el día 28, como se había previsto. El ministerio se comprometió a responder hoy mismo.

Los ayuntamientos afectados por la medida -Sant Boi, El Prat, Viladecans y Gavà- entienden que las obras pueden llevarse a cabo sin cerrar totalmente la circulación de la autopista. Los alcaldes de estas poblaciones se entrevistaron ayer con el jefe de la demarcación de Carreteras del Estado en Cataluña, Ángel Sangrós, a quien solicitaron la creación de una comisión que estudie alternativas menos perjudiciales para el tráfico. Sangrós aseguró que daría una respuesta en 24 horas. Los alcaldes, que cuentan con el apoyo del Consejo Comarcal del Baix Llobregat, también critican el hecho de que Fomento no les avisara hasta el pasado viernes de sus intenciones. Con más antelación, los ayuntamientos podrían haber tomado medidas organizativas para favorecer el tráfico en la carretera comarcal C-245 y en la autovía de Castelldefels, señalada ésta por Fomento como principal itinerario alternativo. En el fondo del asunto planea una nube de prisas para hacer coincidir en el tiempo el fin de las obras de la pata sur con la entrada en servicio de la autovía del Baix Llobregat, prevista para el día 22. Prisas que no se acaban de entender cuando la pata sur, que debe unir las rondas con el aeropuerto y la A-16, fue planificada para 1992. "Si hemos esperado desde hace casi 10 años, podemos esperar uno o dos meses más", señaló el alcalde de Viladecans, Jaume Montfort. Por su parte, la alcaldesa de Sant Boi, Montserrat Gibert, aseguró que Fomento se había comprometido hace algún tiempo a que "los cortes de circulación serían parciales". De las críticas municipales tampoco se libra la Generalitat, ya que la Administración autonómica dio el visto bueno a la medida ejecutada por el ministerio. Este aspecto será llevado al Parlament por el grupo de IC. El diputado Ignasi Riera ha presentado tres preguntas con el objetivo de que el Ejecutivo catalán dé explicaciones públicas de por qué se ha procedido al corte de la A-16 sin previo aviso y sin negociar antes con los ayuntamientos. Entre tanto, los problemas circulatorios continuaron ayer en puntos de la red viaria del sur de Barcelona, especialmente en las horas punta de entrada y salida de Barcelona. A esas horas, las colas en la A-16 a la altura de Sant Boi, punto en que los dos carriles de la autopista se reducen a uno, llegaron a alcanzar los cinco kilómetros. La situación se complicó aún más por un accidente que sufrieron tres camiones en la autovía de Castelldefels en Viladecans y que obligó a cortar esta carretera en dirección a Barcelona durante media hora.