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Elorza anuncia que parará San Telmo si no se implican las instituciones

Maribel Marín Yarza

San Telmo está cada vez más cerca de convertirse en el Museo para la Cultura Vasca. En abril concluirá la tercera fase de restauración del claustro del antiguo convento, pero aún restan 2.000 millones de inversión para hacer realidad el proyecto y el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, juzga necesario y exige un mayor compromiso de las instituciones. "Nosotros ya nos paramos", dijo ayer. "No vamos a hacer más obra hasta que se constituya un consorcio que aglutine al Gobierno vasco, la Diputación de Guipúzcoa, el Ayuntamiento, y si lo desea también al Ministerio de Cultura, para abordar los 2.000 millones que faltan", agregó. Elorza, en busca de rápidas declaraciones de intenciones, pidió ayer un compromiso de financiación a partes iguales. "El que no quiera asumir esa responsabilidad en esta intervención cultural", indicó, "que lo diga de una vez para no perder más tiempo". Hasta el momento, la aportación económica de las instituciones para el futuro Museo para la Cultura Vasca ha sido desigual. El Ayuntamiento de San Sebastián ha destinado 162 millones de pesetas para la restauración de un claustro, cuya titularidad es del Gobierno central. La inversión de la Diputación de Cultura ha alcanzado los 18 millones de pesetas; mientras que el Gobierno vasco ha puesto 129 -40 pendientes de ratificar- y se espera una aportación de 122,5 millones del Ejecutivo central. Sin "excusas" La petición de este compromiso institucional para hacer realidad el nuevo proyecto de San Telmo responde a la convicción de sus responsables políticos y técnicos de que el museo se convertirá en patrimonio de toda Euskadi. Y llega en un momento en el que, a juicio de Elorza, no caben "excusas" para desvincularse de la financiación de la fase más ambiciosa, que alcanza un presupuesto de 2.000 millones. "El Guggenheim ya está en marcha", recordó Elorza, "el Kursaal está a punto de culminarse y pedimos el mismo tratamiento que se le ha dado al Museo de Bellas Artes de Bilbao". El primer edil apuntó que el inicio de las obras de rehabilitación de San Telmo, un edificio con graves problemas de humedad, entre otras afecciones, fue una decisión conjunta del Gobierno vasco, la Diputación de Guipúzcoa y el Ayuntamiento de San Sebastián. Por eso pidió un compromiso institucional firme para antes de las próximas elecciones municipales. Mientras continúa adelante la tercera fase que completará la rehabilitación del claustro y la bóveda alta de San Telmo. Hace dos semanas se adjudicó esta tarea de recuperación a la empresa Construcciones Ibargoein en 143 millones. Y se prevé que el trabajo esté concluido para abril de 1999. Así, podrá inaugurarse el próximo verano la primera parte de la exposición Signos de Espiritualidad, que incluye el proyecto del Museo para la Cultura Vasca.

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