_
_
_
_

El circo estable exhibirá algunos de sus animales en una calle adyacente

Antonio Jiménez Barca

Cuando se levante el circo estable de Madrid en la ronda de Atocha (no antes del 2000), los vecinos gozarán de un entretenimiento añadido: un viejo callejón de artesanos reconvertido en un minizoo servirá para exhibir los animales. El Ayuntamiento ya ha diseñado cómo será el futuro edificio, que albergará, además de la pista, un museo y una escuela de circo. Emilio Aragón, Miliki, que gestionará esta instalación, tranquiliza al vecindario: "Se expondrán caballos, pero no fieras salvajes".

Los técnicos municipales ya han terminado el proyecto que convertirá la vieja y semiderruida fábrica de galletas Pacisa, en el número 34 de la ronda de Atocha, en un circo estable. Una de las ideas consiste en transformar el callejón que nace en la calle de Juan Sebastián Elcano, y que actualmente alberga talleres de artesanos en desuso (sólo un marmolista resiste), en una especie de zoo. Emilio Aragón, padre, y Emilio Aragón, hijo, el protagonista de Médico de familia, han sido los dos impulsores del proyecto. Desde hace nueve años, el plan de construir un circo estable, de cemento y ladrillo, y no desmontable, que sirviera de heredero al mítico Price de los años sesenta, ha dado tumbos por varias esquinas de Madrid: primero se quiso instalar al lado de la plaza de toros, en Ventas; después se buscó un lugar junto al albergue de San Isidro, más tarde se pensó en una parcela de Méndez Álvaro. Pero todo fracasó.El concejal socialista José María de la Riva criticó ayer "la tardanza del PP en poner en marcha un proyecto ilusionante". Ahora parece que la operación se encarrila, según el testimonio del padre de los Aragón: "Estoy convencido de que el Ayuntamiento va a llevar el proyecto adelante", explicó. Y añadió: "El mismo alcalde se ha comprometido a que Madrid, por fin, tenga un circo estable".

Cinco plantas y un sótano

Los planos que ya ha terminado el arquitecto municipal Mariano Bayón prevén cinco plantas y dos sótanos. En estos últimos se ubicarán las aproximadamente 150 plazas de aparcamiento subterráneo con que contará el edificio.Existirán localidades para unas 2.500 personas. Miliki adelantó que no servirán sólo para ver espectáculos circenses. "Ahí se podrá poner desde lucha libre a campeonatos de patinaje. La temporada de circo durará tres meses en invierno y uno en verano, según mis previsiones". El coste total de la obra, según el informe del arquitecto del Ayuntamiento, será de 880 millones de pesetas. Emilio Aragón, padre, explicó ayer que será la Hacienda municipal la que corra con los gastos. A este respecto, De la Riva recordó que en los presupuestos del año que viene no existe ninguna partida para construir el circo. "Mucho me temo que, una vez más, el PP esté engañando a los madrileños diciendo que va a hacer algo sin contar con el dinero". Una vez que el edifico esté terminado, la familia Aragón se hará cargo de gestionar y programar las actuaciones.

Una de las ideas reflejadas en los planos, fruto de las recomendaciones de Miliki, es la de crear un museo del circo. De buscar y encontrar los fondos se encargará Emilio Aragón: "Yo soy una de las personas que más sabe de esto en España y sé dónde buscar y dónde preguntar para hacerme con una gran colección de objetos".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_