La Guardia Civil busca fuera de la región al hombre que mató a puñaladas a su esposa
La Guardia Civil extendió ayer al resto de España su movilización en busca del hombre que el sábado mató a puñaladas a su esposa embarazada en un chalé de Las Rozas. Tras el crimen, el homicida se dio a la fuga en un Volkswagen rojo, hecho que motivo un espectacular despliegue de agentes por toda la región. Los guardias centran sus pesquisas en las provincias limítrofes de Madrid. Sin embargo, los investigadores barajan otra hipótesis de trabajo: la del suicidio del fugado, un filólogo de 35 años, empleado en una empresa multinacional y en tratamiento psiquiátrico. Anoche, el acusado seguía en paradero desconocido, según la Delegación de Gobierno.La Policía Judicial también ha interrogado durante el fin de semana a los amigos y familiares del acusado en busca de nuevas pistas para localizarle.
El matrimonio residía en un chalé adosado de la calle de la Playa de Gandía, en la urbanización Punta Galea. El inmueble era propiedad de los padres del marido. Antes, el matrimonio había vivido en Londres por motivos de trabajo, y no fue hasta hace cuatro años, recién nacido su único hijo, cuando regresaron a España.
El hombre carece de antecedentes policiales y, siempre según las primeras versiones, no maltrataba a su mujer, de 39 años. Su equilibrio psiquiátrico, sin embargo, era objeto de tratamiento. La semana pasada visitó al especialista. Este factor pudo influir en la agresión conyugal.
El Juzgado de Instrucción número 2 de Majadahonda ha decretado el secreto del sumario. La mujer será enterrada hoy en Ciudad Real.
