Piqué niega que exista un plan ya decidido sobre el futuro de RTVE
El Congreso rechaza todo intento de cambiar el presupuesto
El PP y los nacionalistas -salvo el PNV- rechazaron ayer, en el Congreso, el gesto de "buena voluntad" propuesto por el PSOE para que el presupuesto del Estado enjugue 80.000 millones de la deuda de RTVE. Tampoco aceptaron una enmienda de IU que elevaba la aportación pública a 168.000 millones. El portavoz del Gobierno, Josep Piqué, negó la existencia de un plan predeterminado para el ente.
El nuevo director general, Pío Cabanillas, cuyo nombramiento se espera para mañana, gestionará RTVE con las cuentas diseñadas por su antecesor, que prevén un presupuesto de gastos por valor de 252.201 millones de pesetas y otro de inversiones por 14.169 millones. Como los ingresos previstos son totalmente insuficientes, se necesitará un endeudamiento de 171.873 millones para hacer frente a dichos compromisos, con lo cual la deuda acumulada por el ente alcanzará los 765.000 millones. Cambiar ahora ese presupuesto no resolvería el problema económico, argumentó el portavoz del PP, José Manuel Peñalosa.En el curso de este debate, la diputada socialista Rosa Conde aceptó que Pío Cabanillas es un hombre "más dialogante" que "el sectario" López-Amor; pero expresó sus temores por el futuro de RTVE, dado que "la política de comunicación la dirige Aznar, que no quiere afrontar el problema de la deuda" y porque desconfía del "Informe Piqué" sobre el ente. Felipe Alcaraz, de IU, insistió en que el Gobierno pretende ahora "una televisión marginal y privatizar La 2".
Ningún miembro del Ejecutivo estuvo presente en ese debate. Piqué respondió a dichas aseveraciones con unas declaraciones a la agencia Efe, en las que negó la existencia de un plan ya elaborado para RTVE. Admitió que se ha hecho un análisis financiero "para perfilar una oferta de diálogo" y recomendó tranquilidad a los empleados del ente público -algo más de 9.000-, afirmando que "se haga lo que se haga, se hará bien".
Destino de López-Amor
Mientras tanto, el todavía director de RTVE, Fernando López-Amor, que el martes visitó al vicepresidente del Gobierno, Francisco Álvarez Cascos, mantuvo ayer una considerable actividad: asistió a la entrega de premios del Grupo Voz y firmó un acuerdo con el presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, por el que se incorpora un canal de televisión gallega a la plataforma de RTVE para América. En medios políticos se habló ayer de la posibilidad de que López-Amor pase a ocupar la presidencia de Hispasat, algo que López-Amor eludió confirmar o desmentir.El Consejo de Administración de RTVE ya ha recibido el anuncio de Álvarez Cascos sobre el propósito de nombrar a Cabanillas como nuevo director general. El consejo dará mañana su parecer. De los ocho consejeros que sobreviven a las vicisitudes de la actual legislatura, el actual presidente, José Recalde (PNV) se pronunciará a favor. Los tres consejeros socialiastas decidirán hoy su postura, aunque Diego Carcedo adelantó, a título personal, que se inclina por la abstención. El representante de IU, Rodolfo Ruiz Ligero, condicionó su voto a que Cabanillas se comprometa a "mantener el empleo y resuelva el problema de la deuda".
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