_
_
_
_
_

La investigación del Congreso conduce a otros escándalos de Clinton

Los apuros del presidente regresaron ayer al primer plano de la actualidad estadounidense una vez digeridos los resultados de las elecciones legislativas y superada, por el momento, la crisis con Irak. Henry Hyde, presidente del Comité de Asuntos Judiciales de la Cámara de Representantes, informó que desea que el fiscal especial Kenneth Starr no sea el único testigo que declare ante ese comité. Hyde mencionó el nombre de John Huang, amigo de Clinton desde los tiempos de Arkansas y uno de los grandes recaudadores de fondos para sus campañas electorales.La Casa Blanca, que ya da por segura su victoria en el caso Lewinsky, reaccionó con un escalofrío ante la posibilidad de que Huang comparezca ante el comité. Huang tiene información muy comprometedora para el presidente en dos asuntos ajenos al caso Lewinsky: el escándalo inmobiliario Whitewater y la financiación de la campaña electoral de 1996.

Huang es una de las personas sospechosas de haber comprado el silencio de Webster Hubbell, un socio de los Clinton en Whitewater. En 1995, Hubbell prefirió ir a la cárcel por su relación con el caso Whitewater antes que implicar al presidente. Pero coincidiendo con esa actitud recibió de altos funcionarios de la Casa Blanca y amigos de Clinton, entre ellos Huang, un mínimo de 500.000 dólares (cerca de 75 millones de pesetas).

Huang también recaudó para la campaña electoral de Clinton de 1996 varios millones de dólares procedentes del grupo Lippo y de otras empresas asiáticas. Con posterioridad a las elecciones, el Partido Demócrata reconoció el origen ilegal de esas contribuciones y devolvió la mayor parte.

El Comité de Asuntos Judiciales, que preside Hyde, tiene que decidir si recomienda al pleno el procesamiento para el impeachment (destitución del presidente). Sus trabajos no están necesariamente limitados al caso Lewinsky. El pasado octubre, el pleno de la Cámara autorizó al comité a realizar una investigación de temática ilimitada sobre posibles delitos cometidos por Clinton. En su día, Richard Nixon también sufrió durante el Watergate una investigación sin límites temáticos o temporales.

Hyde seguía insistiendo ayer en su deseo de terminar la instrucción antes de final de año. El Congreso surgido de las elecciones del pasado día 3 se constituirá en enero, y muchos de los miembros de su mayoría republicana no desean recibir la patata caliente de tener que pronunciarse sobre la destitución de un presidente que sigue contando con el apoyo de dos tercios de sus compatriotas.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_