Los inspectores vuelven a Irak y las tropas de EE UU a sus bases

Cohen precisó, no obstante, que seguirán en la región unos 180 aviones de combate, entre

ellos bombarderos B-52, y advirtió que, si Sadam Husein no cumple esta vez de forma

escrupulosa las exigencias del Consejo de Seguridad de la ONU, Estados Unidos atacará sin

previo aviso. "Creo que todo el mundo entiende que se trata de la última oportunidad para

Sadam", declaró el secretario de Defensa norteamericano. La decisión estadounidense de

suspender el ataque, acompañada de una amenaza de actuar por otros medios para derrocar a

Sadam, llenó de alivio a la población iraquí, que temía una matanza, y a la oposición de ese

país, que confía en que Bill Clinton consiga finalmente acabar con la dictadura iraquí.

Ochenta y cuatro de los 100 inspectores que dejaron Irak la pasada semana volverán hoy

mismo. El resto lo hará mañana. Su primera labor será pedir una lista de los proyectiles que

tiene Irak capaces de ser cargados con gases venenosos.