Desguace de la estación
(...) Los partidarios de la Estación Espacial Internacional han ensayado y luego descartado diversas justificaciones para el proyecto: una fábrica en órbita, una manifestación de la supremacía tecnológica estadounidense, un jalón en el camino hacia Marte y, últimamente, un ejemplo de cooperación internacional en el espacio. A medida que disminuye hasta casi cero la contribución de Rusia, la estación va perdiendo incluso su valor simbólico. Dado que el valor científico nunca ha sido muy alto, cabe preguntarse si merece la pena que el proyecto siga adelante. Y la respuesta es no. Casi la única razón que se encuentra para construir la estación es la de mantener ocupados a los astronautas de EE UU. Pero con 20.000 millones de dólares gastados ya, y con muchas probabilidades de que las dificultades rusas alarguen de nuevo los plazos previstos, la NASA trata desesperadamente de poner en órbita partes sueltas de la estación, simplemente para dar la idea de que el proyecto es ya imparable. (...) Y éste es el típico programa de costes elevados que se supone que debería evitar la agencia espacial.
Abandonar la estación ahora sería doloroso; pero al menos ahorraría 30.000 millones de dólares, seguramente más, ayudaría a la NASA a ser una organización más dinámica y sensible, capaz de concentrarse en sus objetivos primordiales de investigación e impulsaría la privatización de la industria espacial. (...)
, 13 de noviembre
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.