La Comisión Eléctrica considera abusiva la ayuda de un billón al sector

El presidente de la Comisión Nacional del Sistema Eléctrico (CNSE), Miguel Ángel Fernández Ordóñez, aseguró ayer en el Congreso que con los datos de evolución del sector eléctrico en la mano no se justifica la entrega "ni de una peseta" a las compañías eléctricas en concepto de costes de transición a la competencia (CTC). El PSOE ha demandado una posición sobre ello del Tribunal de la Competencia.

A finales de septiembre, las eléctricas e Industria alcanzaron un acuerdo por el que las empresas podrán "titulizar" (dividir y colocar en el mercado a través de entidades financieras) un billón de pesetas en concepto de compensación por los menores ingresos derivados de la competencia. El proceso, denominado "titulización", se considera, por parte de la CNSE, la introducción de un impuesto injusto (equivalente al 4,5% de la tarifa eléctrica), que obligará, entre otras cosas, a modificar la Ley del Sector Eléctrico, aprobada a finales de 1997.Fernández Ordóñez explicó también ayer que el ministro de Industria, Josep Piqué, aseguró el martes a la CNSE que no existe todavía una decisión tomada sobre las compensaciones a las eléctricas, pese a que éstas las dan por seguras.

El máximo responsable de la CNSE expuso la frontal oposición del organismo que preside hacia las compensaciones a las empresas ante la Comisión de Industria y Energía del Congreso. Previamente había comparecido el presidente del Tribunal de Defensa de la Competencia, Amadeo Petitbó, quien eludió pronunciarse sobre la legalidad de dichas compensaciones al no tener constancia documental del acuerdo. Petitbó se limitó a reconocer que las ayudas "pueden tener efectos en el mercado".

La cautela de Petitbó chocó con la vehemencia con la que el presidente de la CNSE criticó el pacto de las eléctricas e Industria. En opinión de Fernández Ordóñez, la petición de las compañías, supuestamente aceptada por Piqué, para recibir de una sola vez un billón de pesetas en concepto de compensación por los costes de transición a la competencia "es desmesurada, tendrá efectos negativos sobre los consumidores, que pagarán lo que no deben, y sólo beneficiará a las empresas".

La polémica en torno a los denominados CTC se inició en septiembre de este año, con el anuncio del pacto entre Industria y las compañías del sector, y parte de un hecho: la Ley Eléctrica, aprobada en 1997, fijó que las empresas podrían recibir, como máximo, 1,9 billones de pesetas (1,6, descontadas las ayudas al carbón) en concepto de compensaciones por la mayor competencia, a distribuir en 10 años y en cuantía variable, determinada por la evolución de factores como la demanda (que ha crecido por encima de lo previsto) y los tipos de interés (que han bajado espectacularmente). Esa cantidad, hipotética, se convertiría en fija si el acuerdo entre las compañías eléctricas e Industria se lleva a efecto. Según la CNSE, en estos momentos no se justifica la entrega del billón de pesetas porque, simplemente, las eléctricas han sido compensadas vía tarifas. Y ello porque, siempre según el organismo, si bien es cierto que la liberalización del sector se ha adelantado respecto al calendario previsto, también lo es que este mismo año, la electricidad debería haber bajado un 8,25%, y en cambio, la reducción de tarifas se ha limitado al 3,6% (para 1999, la reducción prevista es del 2,5% y para el 2000, del 1%).

Aunque Fernández Ordóñez no mencionó cifras, estudios de la Comisión muestran que, dada la evolución de la demanda de electricidad, los tipos y las previsiones de vida de las centrales eléctricas, en estos momentos las empresas del sector no sólo no deberían recibir compensaciones por la competencia, sino que deberían devolver hasta 50.000 millones a los consumidores.

La polémica en torno a los CTC tiene visos de continuar en las próximas semanas. El PSOE mantiene una oposición frontal a las compensaciones, demanda un pronunciamiento al respecto del Tribunal de Defensa de la Competencia y acusa al Gobierno de facilitar la constitución de oligopolios en torno a las eléctricas. CiU parece a la expectativa y el PP considera que las compensaciones son necesarias para mantener la fortaleza de las empresas del sector.

Acusaciones contra Piqué

Piqué y el diputado socialista Javier Fernández sostuvieron ayer un tenso debate en el Congreso. Fernández presentó una dura interpelación contra el Gobierno por la liberalización del mercado eléctrico. Piqué la defendió y reprochó a los Ejecutivos socialistas haber negociado pactos secretos sobre tarifas con las eléctricas "en Nochevieja y en el despacho de mis antecesores".El cruce de acusaciones finalizó con una velada amenaza del diputado socialista al ministro y ex presidente del grupo químico Ercros: "De tanto mirar atrás, señor ministro, se va a estrellar al tropezar con su propio pasado", aseguró Fernández. Piqué no utilizó su turno de réplica.