Cinco alcaldes piden a Macias que explique la negativa a ampliar la A-16

La negativa del grupo parlamentario de CiU a construir un tercer carril en la autopista A-16 para solucionar los atascos que se producen entre Sant Boi y Castelldefels ha levantado una polvareda política en el Baix Llobregat. Los ayuntamientos de los cinco municipios afectados -Castelldefels, Gavà, Viladecans, Sant Boi y El Prat- no escondieron ayer su malestar por la actitud de CiU, sobre todo teniendo en cuenta que el consejero de Política Territorial, Pere Macias, se comprometió a ejecutar la obra.

Macias fue incluso más allá y puso fecha a la ampliación. De ahí que los alcaldes de El Prat (Lluís Tejedor), Castelldefels (Agustín Marina), Viladecans (Jaume Montfort), Gavà (Dídac Pestaña) y Sant Boi (Montserrat Gibert) hayan solicitado con carácter de urgencia una entrevista con el consejero de Política Territorial para reiterarle la necesidad de una solución inmediata a los problemas de tráfico de la A-16 y para que aclare de una vez por todas la posición de la coalición que gobierna en Cataluña. Los alcaldes no entienden cómo el consejero y el grupo parlamentario de la coalición a la que pertenece pueden tener posturas contrapuestas sobre la construcción del tercer carril de la A-16. La comisión de Política Territorial del Parlament debatió el pasado miércoles una proposición no de ley presentada por el PSC e IC -los partidos a los que pertenecen los alcaldes del Baix Llobregat que exigen explicaciones a Macias- para hacer posible la construcción del tercer carril de esa autopista. La propuesta fue rechazada con los votos en contra de CiU y la abstención del PP. El argumento utilizado por los nacionalistas fue la necesidad de redactar, antes de emprender las obras, un estudio de vialidad de la carretera. Los socialistas, por el contrario, argumentaron que la evidencia de la necesidad de ampliar la A-16 para asimilar el flujo creciente de tránsito hacía innecesario cualquier estudio previo. Proyectada para 1999 Esa opinión era compartida por el consejero de Política Territorial cuando el pasado mes de julio se comprometió a que en el transcurso de 1999 la Generalitat redactaría y adjudicaría el proyecto de construcción del tercer carril. Los alcaldes mostraron ayer su sorpresa "ante el nuevo giro de CiU y el Gobierno de la Generalitat". El alcalde de Viladecans, Jaume Montfort, fue más lejos y aseguró que detrás del voto negativo de CiU "hay motivos políticos y no sólo técnicos". Y añadió: "Yo invitaría a los parlamentarios convergentes a que utilizaran la A-16 entre las siete y las diez de la mañana o entre las cinco de la tarde y las nueve de la noche para que se den cuenta de que, por lo menos, ampliar la autopista con un tercer carril es una necesidad urgente". La obra de ampliación entre Castelldefels y Sant Boi, el único tramo de la A-16 que está libre de peaje, no plantea excesivos problemas de construcción, por cuanto podría utilizarse la amplia mediana ahora existente en la mayoría de ese recorrido. El hecho de que esos terrenos ya fueran expropiados en el momento de construirse la autopista, en 1992, eliminaría también parte de los trámites urbanísticos que requieren estas obras y acortaría el proceso.