Arnaldo Otegi presiona al PNV para que no dé entrada a los socialistas en el Gobierno vasco

Lo que parecía imposible tan sólo hace cuatro meses se ha convertido en una realidad. Herri Batasuna, integrada en Euskal Herritarrok, sigue empujando al PNV para ocupar, desde fuera y con apoyos puntuales, el espacio que tuvo el PSE en el Gabinete de la anterior legislatura. El portavoz de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegi calificó de "paso atrás" el posible pacto de peneuvistas y EA con el PSE, que los primeros estudiarán desde hoy en su Asamblea Nacional y los socialistas analizarán el sábado. Otegi ofreció "garantías totales" al PNV de un respaldo sólido.

La semana en la que se dará forma al nuevo Gobierno vasco comienza hoy. El PNV ha convocado a los miembros de su Asamblea Nacional a partir de las 19.30 horas, y el PSE, inmerso en un pozo de dudas, reunirá a los miembros de su Comité Nacional el próximo sábado.Ellos son los principales protagonistas del segundo acto de la formación del Ejecutivo autonómico. Una obra que posiblemente sea larga, tediosa y en la que Euskal Herritarrok está intentado darle un toque personal al guión. Ayer, comenzó a intentar condicionar desde fuera a los actores. El portavoz de Herri Batasuna, Arnaldo Otegi, rechazó la presencia del PSE-EE en el futuro Gobierno vasco al asegurar que esta posibilidad "significaría dar un paso atrás y volver otra vez a la época pre-Lizarra". En su opinión, un pacto de ese tipo "cuartearía" el acuerdo alcanzado en Estella.

EH, que no ve con buenos ojos la reedición del tripartito PNV-PSE-EA, transmitió la pasada semana al candidato peneuvista, Juan José Ibarretxe, que no iban a estar físicamente en el próximo Gobierno vasco, que su meta estaba en los ayuntamientos y diputaciones, y que, en todo caso, estarían dispuestos a apoyar desde fuera a un Gobierno en minoría formado por los nacionalistas del PNV y EA. Para dar fuerza a esa idea, Arnaldo Otegi ofreció ayer "garantía total" al PNV de que sus apoyos externos son sólidos y de que puede fiarse de él como socio a distancia.

EH se ha lanzado a la carrera institucional y está imparable. En un documento que ha distribuido entre sus bases explica que se ha acabado la época del "apartheid" y hace un llamamiento a sus afiliados a luchar por los ayuntamientos. La circular dice que la nueva situación política no justifica ya alianzas para expulsarles de los equipos de gobierno de las instituciones municipales. A EH le interesa dirigir aquellos en los que han sido o vayan a ser la lista más votada, como los emblemáticos de Hernani, Mondragón o Pasaia. "Las próximas elecciones municipales son una cita de vital importancia", subraya la circular.

Territorialidad

De hecho, HB planteará en la próxima reunión del Acuerdo de Lizarra al PNV, EA e Izquierda Unida su proyecto de crear una "Asamblea de Ayuntamientos de Euskal Herria", un órgano supraterritorial en el que tengan cabida los alcaldes de Euskadi, Navarra y el País Vasco francés. Según los cálculos de la coalición, de conseguir el respaldo del PNV y EA, así como de un cierto número de alcaldes vascofranceses, las instituciones municipales que se integrarían en este órgano representarían a más del 80% de la población de las citadas comunidades.Según diversas fuentes, portavoces del PNV y Arnaldo Otegi mantuvieron una reunión el día después de las elecciones. Aunque ninguno de los dos partidos ha confirmado el encuentro, fuentes cercanas a los interlocutores aseguran que en la entrevista se produjo y que no estaba presente el futuro lehendakari, Juan José Ibarretxe.

El interés por los ayuntamientos y las diputaciones es también grande en las ejecutivas del PNV y de EA. El pasado lunes celebraron una reunión para estudiar la alianza con el PSE-EE para conformar el próximo Gobierno vasco y ver las posibilidades de concurrir con listas conjuntas nacionalistas a las elecciones municipales de junio de 1999. La reunión tuvo lugar en la sede del Gobierno vasco en Vitoria y a ella asistieron Joseba Egibar, Juan María Ollora y Gorka Agirre por el PNV, e Inaxio Oliveri, Sabin Intxaurraga y Rafael Larreina por EA.

El partido de Carlos Garaikoetxea se mostró remiso a la incorporación del PSE, una apuesta personal de Ibarretxe. Para EA sólo será posible si los socialistas se acercan mucho al pacto de Lizarra y cambian radicalmente su postura sobre la pacificación. Para ello, el PSE reunirá el sábado, en medio de fuertes presiones externas e internas, al Comité Nacional.