El Ivima favorece en el concurso de pisos públicos a las mujeres maltratadas

La Comunidad de Madrid incluirá a las mujeres maltratadas entre el grupo de personas con especial necesidad, establecido para acceder por concurso a las viviendas de protección oficial, según anunció ayer el consejero de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés."Las mujeres que hayan denunciado malos tratos pueden obtener hasta cinco puntos en la baremación que se realiza a la hora de adjudicar las viviendas", dijo el consejero a través de una nota de prensa.

En el último caso de maltrato a una mujer en Madrid con resultado de muerte de la víctima, se daban serios problemas de vivienda en el matrimonio afectado. El pasado jueves, un hombre de origen persa, Mohammad Fazami, de 55 años, acuchilló a Lila Nasseri, su esposa, de 37, tras una disputa conyugal. La pareja vivía en una planta baja de la calle de Ponzano, en un reducidísimo local, de apenas 40 metros cuadrados de superficie, que el hombre, el homicida, había dividido en un espacio comercial, que servía como frutería y una trastienda, donde vivían, que consistía en un cuartucho donde dormían y cocinaban.

Casi 15.000 mujeres han denunciado en 1998 a sus compañeros por malos tratos, según las estadísticas de la policía y la Guardia Civil. Según la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas, este dato sólo representa un 10% de los casos reales. Esta misma asociación indica que han muerto 46 mujeres en lo que va de 1998, mientras que en 1997 fueron 91 las fallecidas.

Por su parte, el Ivima prevé adjudicar en el próximo año 800 nuevas viviendas (en lo que va de 1998 han sido entregados 814 pisos). La adjudicación de las mismas se efectuará en un 50% en sorteo público, y la otra mitad, según unos baremos que dan prioridad a los casos considerados de mayor necesidad. Este baremo da prioridad a las familias que hayan sido desahuciadas; las que viven en inmuebles carentes de garantías o hacinadas; a los parados de larga duración; a las familias con mayor número de hijos, y ahora, también, a las mujeres que sufren en su familia malos tratos.

Las viviendas concedidas por la Comunidad de Madrid tienen un alquiler de 25.000 pesetas, aunque el Ivima tiene previstas ayudas para aquellas familias que encuentran dificultades para pagar dicha cantidad. En el caso de las viviendas adjudicadas por sorteo también se aplica un mecanismo regulador que prima a los más desfavorecidos: el 50% de las casas de protección se destinan a familias con ingresos entre 0 y 1,5 puntos del salario mínimo interprofesional (SMI); el 30%, a los que perciben del 1,5 al 2, y el 20% restante, a los que se sitúan entre el 2 y el 2,5 del Salario Medio Interprofesional.