_
_
_
_
_

Las cámaras buscan el acuerdo con la CEOE para la presidencia del Consejo

Evitar los viejos enfrentamientos. Ese es el objetivo principal a la hora de nombrar un nuevo presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio. Así lo ha sugerido Economía para no abrir las heridas de las disputas del pasado entre CEOE y las cámaras que aún no han cicatrizado. La muerte repentina de Carlos Ferrer Salat como presidente de Consejo ha obligado a Economía, la patronal CEOE y cámaras a un entendimiento.

Ferrer Salat en los 18 meses que ha permanecido en el cargo ha limado aristas y ha logrado que la patronal y las cámaras al menos no hayan caminado de espaldas. Sin embargo queda un largo trecho por recorrer. Ferrer Salat, fundador y CEOE y hombre de cámaras, ya que permaneció 14 años en el comité ejecutivo de la Cámara de Barcelona, era la persona ideal para acercar los dos modelos de organización empresarial.Propuesto por su antecesor en el cargo, Guillermo de la Dehesa (presidente entre 1991 y 1996), Ferrer Salat contó rápidamente con el visto bueno de Economía y fue aceptado por las cámaras.

En marzo del 1997, el entonces secretario de Estado de Comercio, Turismo y Pymes, José Fernández Norniella, ante el enfrentamiento abierto entre el Consejo y la CEOE, optó por la resolución de la crisis y para ello contaba con una persona idónea. Ahora hay que comenzar de nuevo.

El Comité Ejecutivo del Consejo, compuesto por los 12 presidentes de las principales cámaras barajó el pasado sábado dos opciones. La primera sería un presidente de una cámara importante. La segunda una persona de reconocido prestigio.

El primer camino es dificil de sacar adelante por las diferencias que existen entre las cámaras como quedó demostrado en la elección del vicepresidente a los dos días de la muerte de Ferrer para ocupar el cargo de forma interina durante 15 días.

El mensaje que se transmite desde CEOE en esta ocasión es de absoluta neutralidad. Sin embargo, fuentes de las cámaras recuerdan que esto es solo apariencia y como prueba aportan el apoyo de la patronal madrileña CEIM, adscrita a CEOE, para relevar a Adrián Piera en beneficio de Juan Luis Mato. El presidente de CEIM, Fernando Fernández Tapias, hizo valer su influencia y cercanía al Gobierno del PP.

Juan Luis Mato, empresario textil madrileño, amigo personal de Rodrigo Rato, ministro de Economía, ha señalado que él no tiene ningún interés en ser presidente del consejo. "Lo menor para el Consejo sería que hubiera consenso o unanimidad porque las votaciones siempre dividen".

Fuentes de Economía han señalado que hay un proceso electoral abierto y que el Gobierno debe permanecer totalmente al margen. El modelo de presidencia ocupada por una persona de reconocido prestigio topa con algunas resistencias por parte de los presidentes de varias cámaras de peso. De hecho, entre los miembros del comité ejecutivo prima la opinión de que sea un empresario de las cámaras.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_