El PSPV llevará al fiscal el "caso Orihuela" protagonizado por el PP
El secretario general del PSPV, Joan Romero, anunció ayer su decisión de poner en conocimiento del fiscal anticorrupción cuantas informaciones, declaraciones, artículos en prensa y denuncias contra el PP están haciendo públicas los cinco concejales expulsados por esta formación política en Orihuela. Para Joan Romero, las presuntas prácticas de corrupción del PP oriolano denunciadas por los ediles díscolos parecen "suficientemente graves para que el fiscal actúe".
"Una de dos", añadió el máximo dirigente socialista en la Comunidad, "o esos concejales ya deberían estar empapelados o el fiscal tendría que estar investigando a los denunciados". En rueda de prensa celebrada en Orihuela, Romero declaró que en este asunto "no existe término medio", ya que no se trata de denuncias anónimas, sino de escritos firmados que alertan sobre actuaciones graves de corruptelas. "La fiscalía debe ver, por lo menos, si hay razones o indicios para abrir diligencias", Para el secretario general del PSPV, el desarrollo y final de la crisis del PP local ha supuesto que Orihuela y la comarca de la Vega Baja se hayan "paseado" por toda España "como un foco de corrupción". Los conocidos como casos Cartagena, Dolores y Orihuela, desempolvados en el último año, fueron los referentes a los que se acogió Joan Romero para exponer la gravedad del asunto. Para los socialistas valencianos, el "punto flaco" del PP que preside Eduardo Zaplana "está aquí, y su propia gente es la que empieza a desvelar prácticas poco claras sostenidas en el tiempo". Romero remarcó que es un grupo de concejales del propio PP el que habla de corrupción en Orihuela. "Esos concejales vienen denunciando desde hace tiempo al presidente de la Diputación, Julio de España; al vicesecretario general del PP, Serafín Castellano; al consejero de Economía, José Luis Olivas, y al propio presidente Eduardo Zaplana, y por todo ello yo tengo alguna razón para pensar como ellos". El dirigente socialista, por otra parte, ratificó la decisión de su partido de no aprovechar la coyuntura política local para plantear una moción de censura contra el alcalde de Orihuela, José Manuel Medina, que ha perdido la mayoría absoluta tras la expulsión de cinco de sus concejales: "Los socialistas dejamos esa tradición de acceder al poder con censuras para Luis Fernando Cartagena y Eduardo Zaplana, que accedieron de esa forma a las alcaldías de Orihuela y Benidorm, y lo que tenemos claro es que el pueblo será quien decida sobre la situación en las urnas".
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