Hernández admite que hay escuelas que aplican "políticas sibilinas" para no matricular a inmigrantes

El consejero de Enseñanza, Xavier Hernández, reconoció ayer que hay centros escolares financiados con dinero público que practican "políticas sibilinas" para impedir que se matriculen determinados alumnos, especialmente los procedentes de la inmigración, aunque reconoció que su departamento, pese a que tiene indicios de ello, no ha recibido ninguna demanda concreta. Hernández se pronunció de nuevo contra el "reparto forzoso" de estos alumnos, pero asumió el compromiso de abrir un debate sobre el tema y de estudiar las soluciones que se aplican en otros lugares.

El consejero de Enseñanza no pudo evitar referirse al tema más polémico de este comienzo de curso. Tras rechazar las acusaciones de haber hecho una lectura sesgada de la sentencia del TSJC que fallaba en contra del reparto de los llamados alumnos con necesidades especiales, eufemismo que básicamente se aplica a los inmigrantes, Hernández insistió en su postura radicalmente contraria al "reparto forzoso", con el argumento de que va en contra de la libertad de los padres y es anticonstitucional. Sin embargo, ayer reconoció que "no es normal que todos los inmigrantes estén en la escuela pública" y brillen por su ausencia en la privada concertada. "Habrá que repensar el tipo de actuación", dijo, "porque cuando se producen distorsiones hay que comprobar a qué se deben". Según el consejero, hay que evitar "tácticas incorrectas en la selección del alumnado" y detectar a los centros que practican "políticas sibilinas" para seleccionar su alumnado, y aseguró estar dispuesto "a apretarles las clavijas" a estos centros. Hernández quiso dejar claro que su departamento no tiene la culpa de que se produzca esta discriminación. "Pido una asunción previa de nuestra honestidad", dijo. "Pido juego limpio". Y matizó que el asunto es todo menos simple, que no sirven las soluciones únicas y que debe considerarse caso a caso. Para el consejero, éste es un tema en el que confluyen muchos condicionantes. "La realidad social manda", dijo, y "también es cierto que la escuela pública tiene mas presencia en los lugares donde hay más marginación y más inmigración y pobreza". Hernández se mostró absolutamente en contra del reparto forzado de estos escolares con necesidades especiales -"no seremos una repartidora"-, recordó todas las actuaciones de integración que practica su departamento y se comprometió a abrir un gran debate público para analizar otras experiencias y buscar soluciones. Sin embargo, matizó: "Es un tema cualitativamente importante, pero no cuantitativamente, ya que la población inmigrante no supera el 1,9% del total". El curso escolar comenzó sin apenas problemas. Abrieron el 99,73% de los centros públicos de Primaria de Cataluña lo que representa el 99,94% del alumnado. Las clases se iniciarán con retraso tan sólo en cuatro colegios: Collaso Gil de Barcelona, que afecta a 27 alumnos de P3; Fontrubí de Guardiola de Fontrubí, que afecta a 5 alumnos de P3; Pau Vila de Terrassa, que afecta a 103 alumnos de Primaria; y Pere Teixiné de Belianes, que afecta a 43 alumnos. Todos estos centros afectados por obras abrirán en un plazo máximo de una semana.