Abstemios y bebedores compulsivos
Los bebedores moderados de alcohol desarrollan una buena protección de la salud. Pero el alcohol también puede provocar el efecto contrario. La salud tanto de los bebedores compulsivos como de los abstemios empeora si, a pesar de su antagonismo, coinciden en factores de riesgo o en situaciones que repercuten negativamente en la salud como estar en paro o tener dificultades económicas.Una investigación hecha por británicos y australianos, que se publica en el último número de la revista especializada The Lancet, confirma la relación entre el alcohol y la salud de personas de mediana edad, alrededor de los 33 años. El director del estudio estableció como indicadores, las alteraciones psicológicas y las enfermedades crónicas. Un bebedor moderado de alcohol, en el caso del varón, es aquél que en una semana consume entre 11 y 35 copas de vino o jarras de cerveza. Si es mujer, entre 6 y 20.