Fernando Colomo afirma que, haga lo que haga, le sale una comedia

Fernando Colomo estrena el próximo viernes Los años bárbaros, su decimocuarta película, con la que cumple 20 años en el cine y con la que ha intentado escaparse de su especialidad: la comedia. "Hago comedia a pesar mío, sin darme cuenta", afirma, sin embargo, el cineasta. "Pero me interesa la comedia que también es drama. Mezclar géneros, algo muy peligroso, según Godard, es lo que yo busco".

"Recuerdo que con mi primera película, Tigres de papel, nadie pensó que estaba haciendo una comedia. El día que el equipo vio la película todo el mundo salió muy serio de la proyección. A mí también me parecía muy seria. Pero cuando llegamos a San Sebastían y pasaron la película la gente no paraba de reírse. Carmen Maura me miró y me dijo aterrorizada: "¿Pero Fernando, no paran de reírse?". Yo le dije: "Cállate Carmen, a partir de ahora esto es una comedia".Colomo acude a la anécdota como ejemplo de por qué desde que empezó su carrera (que logró despuntar con La vida alegre, un filme que acabó siendo retrato de cierta progresía socialista) hace reír aunque no quiera. Un sentido del humor que aplica cuando lee en la doble página de una revista del corazón que vive desde hace años sumido en el alcohol y las drogas. "No sé, yo sólo les dije que había superado estos 20 años en el cine gracias a la bebida. Al parecer se lo tomaron en serio. Es increíble, a ver quién se toma ahora una copa tranquilo, seguro que más de uno me mirará con cara de pena".

Los años bárbaros, basada en la legendaria fuga de Cuelgamuros (Madrid), con Ernesto Alterio y Jordi Mollá, entre otros actores, y con un presupuesto de 450 millones de pesetas, no es una "comedia descarada sino un drama con momentos cómicos". El filme, asesorado por uno de sus protagonistas, Nicolás Sánchez-Albornoz, busca "el espíritu de aquella fuga en la posguerra y no el relato de los hechos reales".

Colomo (Madrid, 1946), que desde que empezó tiene su propia productora ("pensaba que si yo no me producía, nadie querría hacerlo"), se ha convertido también en descubridor de nuevos cineastas. Apostó por Icíar Bollaín, Alfonso Albacete, David Menkes y Miguel Bardem y ahora estrenará la película de Agustí Vila Un banco en el parque. "Mi vocación como productor es más fuerte de lo que pensaba. Me gusta vivir la emoción de los nuevos realizadores".

A pesar de que Los años bárbaros no se ha estrenado, Colomo ha rodado un nuevo filme, El cuarteto de La Habana, una película de encargo que ha realizado para, según explica, mantener en marcha su productora. "El preocupante retraso por parte del Ministerio de Cultura en la devolución de los pagos que debe nos tiene casi inmovilizados", afirma. "Dicen que no paro de trabajar, pues a mí me gustaría parar y ser un autor serio que hace una película cada tres años", concluye.