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Todos los expedientes de la Administración valenciana estarán digitalizados en el plazo de siete meses

Los 1.200 modelos de expediente administrativo a través de los cuales los ciudadanos solicitan licencias de caza, becas de estudio o subvenciones para innovación tecnológica de talleres textiles estarán digitalizados en el plazo de siete meses, según las previsiones de José Emilio Cervera, subsecretario para la Modernización de las Administraciones Públicas. La digitalización de los expedientes, que permite su tratamiento a través de redes informáticas sin necesidad de recurrir al soporte en papel, permitirá a los ciudadanos recibir información concreta en cualquier momento sobre el estadio de la tramitación de su comunicación, solicitud o queja. Hasta la fecha se han digitalizado 200 modelos de expediente, sobre el total de 1.200 de que dispone la Administración autonómica para atender las demandas de los ciudadanos, una tarea que debe estar culminada en un plazo estimado en siete meses. En principio, los usuarios de la Administración dispondrán de un número de teléfono, que se pretende que sea único antes de fin de año en todo el territorio valenciano. Aquellos ciudadanos que dispongan de Internet podrán acceder directamente a una red de la Administración autonómica, a través de una clave que se definirá probablemente a partir del Documento Nacional de Identidad, y que les permitirá acceder directamente a la situación de su expediente. La digitalización también permitirá a los responsables de la administración obtener información inmediata sobre la circulación de documentación, los puntos en los que se atasca la tramitación de expedientes y las modificaciones en los hábitos de los ciudadanos al acudir a los poderes públicos. Dos decretos y un acuerdo El Consell tiene previsto aprobar mañana dos decretos y un acuerdo que completan un primer tramo del proyecto de modernización de la Administración. El pasado mes de julio se aprobaron una serie de disposiciones previas para unificar el tratamiento informático de los expedientes. Entre ellas, un proyecto que el equipo de Cervera denominaba el decretazo, que fijó las normas para autentificar las firmas y validar legalmente el intercambio de documentación a través de la red informática de la Generalitat. Los nuevos proyectos afectan al registro de entrada y salida de escritos, comunicación y documentación de la Administración autonómica; y a los sistemas de información y atención al ciudadano. Un tercer acuerdo del Consell fija los sistemas de gestión administrativa y de información de la Generalitat, una disposición que establece cómo deben tratarse y en qué dirección deben circular los expedientes. Las reformas introducidas a través de las disposiciones previstas por el Consell son todas ellas de carácter horizontal y sólo afectan a la organización del trabajo, de modo que carecen de dotación presupuestaria. Cada consejería, diputación o municipio asumirá en origen la responsabilidad de ofrecer una versión digitalizada de toda ayuda, subvención o programa que ponga en marcha. Una forma de aplicar la directiva europea relativa a la subsidiariedad, que sugiere que la Administración más próxima al ciudadano debe ser la más atenta a sus necesidades. Cervera admite que lo más complicado hasta la fecha ha sido convencer a los secretarios de las distintas consejerías de la necesidad de modificar sus hábitos de trabajo. El subsecretario de Modernización explica que la nueva organización del trabajo no persigue "suplantar" la gestión política, sólo "lubricar" el engranaje de la Administración para hacerla más eficaz. Todo el proyecto de modernización va encaminado en una dirección, conseguir que el presidente de la Generalitat sea el jefe de una gran organización y no, cómo venía siendo habitual, el jefe de nueve organizaciones distintas, tantas como consejerías tiene el Consell. Cervera asegura que las nuevas formas de gestión administrativa tienen un "impacto nulo" sobre el empleo. Los funcionarios que trasladan expedientes de un despacho a otro podrán optar por trabajos similares o acceder a cursos de cualificación para dominar técnicas informáticas más o menos elementales y adaptarse a las nuevas formas de trabajo. Cervera sí admite que las necesidades de contratar nuevo personal se reducirán.

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