Ardanza sostiene que la sociedad vasca "está mucho mejor" tras sus 14 años de mandato
El lehendakari, José Antonio Ardanza, realizó ayer un balance no exento de cierta autocomplacencia de sus 14 años al frente del Gobierno vasco, poco después de firmar en San Sebastián los decretos de disolución del Parlamento de Vitoria y de convocatoria de las elecciones autonómicas para el 25 de octubre. En una larga alocución a los periodistas, el lehendakari afirmó que se marcha "contento y tranquilo, con la sensación de haber cumplido". Ardanza realizó una lectura muy positiva sobre algunos aspectos de la realidad vasca actual y sostuvo que la sociedad "está mucho mejor" que cuando él accedió a la Lehendakaritza: "Cogí un pueblo muy crispado social y políticamente, al que he intentado traer la cultura del diálogo y la tolerancia. Ahí hemos avanzado mucho". Ardanza, quien recordó con cierta melancolía que accedió a la presidencia cuando sus hijos hacían la Comunión y que se retira siendo abuelo, relató que durante su mandato se han producido "grandes avances en la paz" tras el punto de inflexión que representó la firma del Pacto de Ajuria Enea el 12 de enero de 1988. "El pacto permitió acabar con las diferencias que hasta entonces se registraban sobre cómo afrontar el combate de la violencia. Lo más importante es que la sociedad interiorizó el acuerdo y lo hizo suyo", señaló. Las discrepancias entre los partidos respecto a la aplicación de los contenidos del acuerdo llevaron al lehendakari a presentar la propuesta a la que ha dado su nombre y que no prosperó tras la reunión del Pacto el pasado mes de marzo. Sin embargo, Ardanza puntualizó que "cuando se calme el clima electoral, ese plan servirá para avanzar en la pacificación". El lehendakari, quien se retira de la vida política, se refirió en términos muy elogiosos al candidato del PNV, Juan José Ibarretxe, de quien subrayó su talante "firme y dialogante".
El "lehendakari" considera que el País Vasco ha recuperado "la fe en sí mismo"
En el plano del desarrollo del autogobierno, el lehendakari señaló que bajo su mandato se han aprobado 160 leyes en el Parlamento vasco, lo que ha facilitado "un gran desarrollo" en Educación, Sanidad y Ertzaintza, además de la firma del nuevo Concierto. No obstante, reconoció que el desarrollo estatutario está lastrado por la utilización "partidista" que los gobiernos centrales han hecho de la transferencia de competencias. En este sentido, se preguntó si no estará "agotado" el Estatuto, aunque advirtió que siempre había entendido el autogobierno en términos de Estatuto. Otro de los ejes de su balance versó sobre la buena marcha de la economía vasca y su repercusión en el mercado laboral, donde "nunca ha habido tanta gente trabajando como ahora". El lehendakari recordó que en 1985 había 656.000 personas trabajando en el País Vasco, cifra que hoy se eleva a 783.000 trabajadores. Con todo, reconoció que el paro sigue siendo el "reto principal" de las instituciones, pese a que en el mismo período el número de desempleados haya descendido de 251.000 a 166.000 personas. "El País Vasco estaba al borde de la desertización industrial a mediados de los 80 y hoy ha recuperado la fe en sí mismo. Si el PIB era entonces equivalente al 78% del PIB medio de la Unión Europea, hoy ese porcentaje ha subido al 88%, mientras que en el Estado es del 78%". Ardanza resaltó que el incremento de calidad de vida también ha tenido su correlato en la vertebración social y en la solidaridad: "Somos la única comunidad que destina el 0,7% a cooperación". Fracaso y agotamiento El secretario general del PP vasco, Carmelo Barrio, se mostró muy crítico con la gestión del Gobierno vasco durante la legislatura que ahora acaba y la caracterizó por "el fracaso, la ruptura y la sensación de agotamiento". Barrio dijo a Europa Press que el último Gobierno presidido por Ardanza "no se ha puesto delante ni ha liderado esta sociedad" y ha tenido una orientación hacia las "políticas nacionalistas". El coordinador general de IU-EB, Javier Madrazo, tampoco ahorró críticas a la gestión del Ejecutivo vasco, al que reprochó "ser incapaz de dar respuesta a los tres problemas prioritarios: el desempleo, la exclusión social y el terrorismo". El líder de UA, Pablo Mosquera, también habló de fracaso "porque los grandes problemas con lo que empezó su andadura siguen siendo los mismos". Mientras, la portavoz adjunta del PSE, Rosa Díez, aseguró que en los últimos cuatro años de coalición en la gestión del Gobierno "y desde luego en los siete" que su partido gobernó con anterioridad, se ha demostrado que el entendimiento entre distintas formaciones "es muy bueno para los ciudadanos" y agregó que el Ejecutivo ha aportado "moderación a la vida política, así como consenso y respeto". [Un total de 16.000 locales e instalaciones dedicados a espectáculos y actividades recreativas del País Vasco serán inspeccionados con el objeto de adecuarlos en materia de seguridad, según aprobó el Gobierno en su reunión de ayer.]
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