Las salas de cine valencianas han ganado más de tres millones de espectadores en cinco años

El cine goza de buena salud en la Comunidad Valenciana. Desde 1992 a 1997 el número de espectadores se ha incrementado significativamente y ha pasado de 8.800.000 a 12.230.000, según datos del Ministerio de Cultura y del Institut Valencià d"Estadística. El número de salas de exhibición también ha aumentado durante este periodo, de 205 a 283. Las películas de EE UU siguen siendo, a mucha distancia, las preferidas por el público. Por cada siete filmes americanos se ve uno español, aunque en este sentido el cine nacional ha experimentado un alza en 1997.

El consumo de producciones ciniematográficas también ha aumentado en todo el Estado español, pero en la Comunidad Valenciana el incremento ha sido mayor que la media nacional. En 1992 el número de espectadores valencianos representaba un 10,6% del total nacional, mientras que en 1997 fue de un 11,6%. Esta cifra es inferior, en todo caso, a la que se obtuvo en el ejercicio de 1996, que fue del 12,2%. La recaudación, por su parte, ascendió en 1997 a 6.200 millones de pesetas, que supone un 10,5% del porcentaje nacional. La afición por ir al cine en la Comunidad Valenciana en los últimos años experimentó su mayor auge entre 1994 y 1995, cuando se produjo un incremento de dos millones de espectadores. Precisamente, en ese periodo de tiempo se abrieron 47 salas de exhibición nuevas, pasando de 230 a 277, en coincidencia con un primer repunte de la economía que empezaba a salir de la crisis de 1992. Según los datos de 1997, en la actualidad hay 283 salas en la Comunidad Valenciana. Una gran parte de estos establecimientos son multisalas de grandes centros comerciales ubicados en las zonas metropolitanas. De hecho, estas salas concentran hoy en día el grueso del mercado en detrimento de los grandes cines. El público valenciano continúa inclinándose de forma abrumadora por el cine norteamericano, a gran distancia del español y de otras cinematografías europeas. Sin embargo, dos películas españolas recientes han competido con las superproducciones de Hoollywood: Airbag, de Juanma Bajo Ulloa, y Torrente, el brazo tonto de la ley, de Santiago Segura. No obstante, el ranking de las más taquilleras sigue estando copado por filmes americanos y en este sentido el hábito de consumo de los valencianos no se diferencia del resto de espectadores españoles. Cabe destacar, sin embargo, la buena aceptación que han tenido en la Comunidad Valenciana las proyecciones de una película como Gràcies per la propina, dirigida por Francesc Bellmunt y basada en el novela homónima del escritor valenciano Ferran Torrent, autor también del guión. El filme consiguió atraer la atención de más de 13.000 espectadores, una cifra muy estimable siendo una película española estrenada únicamente en valenciano. Por lo demás, las siete películas valencianas realizadas en 1996 apenas han tenido incidencia en los espectadores y algunas de ellas ni han llegado a estrenarse.