Quebec propone como mayoría para la secesión la mitad más uno

El ministro quebequés de Asuntos Intergubernamentales, Jacques Brassard, declaró que "una mayoría clara es el 50% de los votos más uno" en referencia a la decisión del Tribunal Supremo de Canadá de negar a Quebec el derecho a la secesión pero aceptar que sea la población de esta provincia la que se pronuncie a favor de su soberanía en "clara mayoría" en un referéndum. Si así fuera, Canadá deberá negociar con la provincia francófona una posible secesión, según el fallo del Supremo. Éste último no se pronunció en su fallo sobre qué porcentaje debería constituir esta mayoría. De esta manera, el dictamen del Tribunal Supremo canadiense sobre la legalidad de una hipotética declaración unilateral de independencia por parte del Gobierno de Quebec no ha servido para despejar prácticamente ninguna duda sobre el futuro de esa provincia. El Tribunal Supremo dictaminó el jueves que, según la Constitución canadiense y el derecho internacional, la provincia de Quebec no tiene derecho legal a independizarse de modo unilateral del resto del país. Sin embargo, el Supremo ha dejado la puerta abierta a que sea la población de Quebec la que decida sobre su futuro en un referéndum.

El caso había sido llevado ante el Supremo por el Gobierno federal en un intento de poner fin a las sucesivas tentativas por parte de diferentes ejecutivos separatistas de Quebec de lograr la independencia de la provincia. Pero el fallo del Tribunal Supremo no ha servido para acabar con las viejas tensiones entre el Gobierno central y el nacionalismo de la provincia de Quebec.

Voluntad popular

El actual primer ministro de Quebec, el separatista Lucien Bouchard, ya advirtió antes de que se produjera el dictamen del Supremo que, en su opinión, el futuro de la provincia francófona debe ser decidido "únicamente por los quebequeses" y que la voluntad popular está por encima de cualquier decisión judicial. Brassard afirmó que su Gobierno "jamás ha querido declarar la independencia unilateralmente y siempre ha tenido la intención de negociar con el resto de Canadá". El primer ministro canadiense, Jean Chrétien, se mostró satisfecho con el fallo del Tribunal Supremo. " El Gobierno de Canadá siempre ha creído que era posible practicar el debate sobre nuestro futuro de un modo ordenado y eficaz en el marco de las leyes fundamentales que sustentan nuestra democracia", afirmó Chrétien. "Sin embargo, el procurador general y el primer ministro de Quebec afirmaban que su Gobierno tenía el derecho de declarar unilateralmente la independencia sin tener en cuenta el Derecho canadiense y sin que hubiera un acuerdo sobre el procedimiento de alcanzar la independencia", añadió. La provincia de Quebec ya ha celebrado dos referendos de independencia en los últimos 18 años y en ambos la opción de la separación de Canadá fue rechazada por la mayoría de sus ciudadanos. Bouchard ha reiterado en los últimos meses que si es reelegido en las próximas elecciones provinciales, que deben celebrarse en el plazo de un año, convocará un nuevo referéndum de separación de Quebec del resto de Canadá.