Moody's rebaja la calificación de la deuda de Mitsubishi y de Hitachi
Las malas noticias con epicentro en Japón no cesan. Ayer, la agencia estadounidense de calificación de riesgo Moody's anunció una revisión a la baja de los ratings de dos empresas japonesas emblemáticas, Mitsubishi Electric Corporation e Hitachi Ltd. El anuncio de la rebaja para las dos fabricantes de semiconductores y sus filiales coincidió con una caída del 2,2% en la Bolsa de Tokio, que perdió el nivel psicológico de los 15.000 puntos. El yen continuó su tendencia a la baja y se cotizó a 146 frente al dólar.
En el caso de Hitachi Ltd., Moody's ha decidido rebajar la calificación de su deuda a largo plazo de Aa2 a Aa3. La medida afecta también a sus filiales Hitachi America, Hitachi International BV (Holanda), Hitachi Finance (Reino Unido) e Hitachi Asia. La calificación de Mitsubishi ha sido rebajada, por su parte, de A2 a A3. La caída afecta tanto a la deuda a largo plazo como a la deuda a corto, y se extiende a las filiales en Estados Unidos y el Reino Unido. En ambos casos, la decisión de la agencia estadounidense de calificación se debe al deterioro del entorno comercial en el que se desenvuelven ambas compañías y a la caída en los precios de los productos que fabrican.
La decisión ilustra que la crisis que vive Japón está afectando gravemente al núcleo de su economía. Una consecuencia de la crisis será el espectacular descenso de la inversión directa de las empresas japonesas en el extranjero este año. Según anunció ayer la Agencia de Planificación Económica de Japón, la inversión en el exterior bajará un 56%, desde los 2,7 billones de yenes de 1997 a 1,2 billones este año (alrededor de 1,3 billones de pesetas).
El ambiente pesimista se tradujo ayer en una caída del 2,2% en la Bolsa de Tokio, que rompió la barrera psicológica de los 15.000 puntos, hecho que no sucedía desde hace dos meses. El índice Nikkei cerró en 14.794,66, tras perder 329,27 puntos.
El ambiente pesimista, trufado además de noticias escandalosas, como el reconocimiento efectuado ayer por Japan Airlines de que pagó alrededor de 24 millones de pesetas a los extorsionadores sokaiya para tener una junta general de accionistas pacífica, arrastró también a los mercados asiáticos. Éstos, pendientes de la cotización del yen japonés y de la aparente inactividad del Gobierno de Keizo Obuchi -ayer, el yen cotizó a 146 por cada dólar, frente a los 144 del viernes-, temen el desplome de la divisa nipona, y desde Singapur a Filipinas, pasando por Taiwan, reaccionaron con retrocesos en las cotizaciones de sus propias monedas. Otro país asiático, en este caso Corea del Sur, también está recibiendo señales negativas sobre el funcionamiento de su economía. Ayer, 30 de las principales empresas del país anunciaron que en el primer semestre registrarán unas pérdidas globales de 105.000 millones de pesetas, frente a los beneficios de 113.000 millones de pesetas obtenidos en el mismo periodo de 1997. En la Bolsa coreana, la situación no va mejor. Las 573 empresas cotizadas perdieron en el primer semestre 10.300 millones de dólares (alrededor de 1,5 billones de pesetas) pese a que sus ventas globales crecieron un 22,5% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.