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Decretada la alerta máxima en la región por el peligro de incendios

La región se encuentra desde ayer en alerta máxima contra el fuego. El riesgo de incendios es mayor que nunca por la falta de lluvias, las elevadas temperaturas y el crecimiento de la vegetación. La Dirección General de Protección Ciudadana advierte de que el peligro es extremo en la superficie arbolada de toda la Comunidad. Durante la jornada de ayer, los bomberos efectuaron 20 salidas para sofocar conatos de incendio en monte bajo y terrenos no forestales.

El plan de la Comunidad para luchar contra los incendios forestales del verano (Infoma 98) se puso en marcha el pasado mes de junio. La campaña hace especial hincapié en la prevención y establece las prohibiciones de hacer fuego en los terrenos forestales y en una franja de 200 metros en torno a ellos.Protección Ciudadana admitió ayer que este año la vegetación "está muy seca y el fuego se extiende rápidamente" al menor soplo del aire. "El mayor peligro son los incendios declarados en pastos, porque, aunque carecen de valor ecológico, pueden destruir extensas áreas si no se controlan", agregó un portavoz.

En la Comunidad de Madrid hay 392.968 hectáreas de superficie arbolada, lo que supone un 48,95% de toda la región. De ellas, más de una cuarta parte (114.000 hectáreas) cuentan con la calificación de alto riesgo.

El Plan Infoma 98 permanecerá en vigor hasta el 30 de septiembre. Si para entonces no han llegado las lluvias, se ampliará su duración. Luis Mallo, director general de Protección Ciudadana, reclamó la colaboración de los ciudadanos y recordó que tienen a su disposición el teléfono de emergencias 112.

A lo largo del año, el fuego ha devorado 140 hectáreas, de las que 25 eran superficie forestal. El mayor incendio tuvo lugar el pasado lunes en un pinar de Cadalso de los Vidrios. Las llamas arrasaron 20 hectáreas de pino y monte bajo.

La Guardia Civil detuvo a un anciano de 73 años bajo la acusación de originar el fuego. Se trataba de un hombre, propietario de una finca en el municipio, que era seguido por los agentes de la Policía Municipal y de Protección Civil como sospechoso de causar, al menos, otros ocho incendios menores en la zona. En su coche se hallaron varias botellas de líquido inflamable.

El hombre ingresó ayer en la prisión por orden del titular del Juzgado de Instrucción de Navalcarnero. La abogada del supuesto culpable declaró ayer que su cliente no es un pirómano. "Las acusaciones son falsas", agregó.

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