Muere el parricida de Jaén, que es enterrado junto a su esposa

El hombre de la localidad de Torredonjimeno (Jaén) que asesinó a su esposa el sábado con un cuchillo y el disparo de una escopeta falleció en el hospital en el que había sigo ingresado después de que él mismo se disparase en la cabeza. Antonio Ortega Ramos, de 53 años, apenas sobrevivió unas horas a la mujer a la que mató, Tremenda Ruiz Funes, después de mantener una de sus habituales disputas familiares. Ambos fueron enterrados ayer por la mañana en dos nichos contiguos del cementerio de la localidad en la que residían ante la presencia de cientos de vecinos y de los tres hijos que tenía la pareja. Ninguno de ellos estaba presente en el domicilio de los padres cuando pasadas las 16.30 del sábado Antonio Ortega comenzó a apuñalar a su esposa. Fuentes próximas a la familia dijeron que en un prinicipio los hijos del matrimonio discrepaban sobre el hecho de enterrarlos juntos, aunque finalmente optaron por celebrar el funeral conjuntamente y enterrarlos en nichos contiguos, informa Efe. Las peleas entre el matrimonio no eran un secreto. Los vecinos que acudieron al entierro recordaban a mediodía de ayer que eran frecuentes las disputas, aunque ni la Guardia Civil ni el Ayuntamiento tienen constancia de que la mujer hubiese presentado alguna denuncia por agresiones. Ortega, según indicó ayer un amigo, tenía un carácter fuerte "aunque no violento". Camionero de profesión, se pegó un tiro después de matar a su esposa. El servicio de emergencias 061 lo trasladó en estado muy grave hasta el hospital Ciudad de Jaén, donde fue intervenido. La gravedad de las heridas le provocó la muerte durante la noche. El sábado por la mañana, a partir de las diez, Ortega estuvo en diferentes bares de Torredonjimeno hasta que acudió a su domicilio a comer. Después comenzó la pelea que desembocó en la muerte del matrimonio.