Olivas prevé un crecimiento del 3,9% de la economía valenciana en 1998

El consejero de Economía y Hacienda, José Luis Olivas, auguró que este año será "excelente" para la economía valenciana. Según el consejero, en la Comunidad, la economía crecerá un 3,9% al final del presente ejercicio, una décima más del incremento previsto para el conjunto de España. Olivas presentó ayer el estudio de coyuntura económica valenciana de 1997, año que calificó de "muy bueno", pero resaltó que este ejercicio presenta "perspectivas aún más favorables".

Según explicó el consejero, la economía valenciana "ha entrado en una senda de crecimiento sostenido con elevadas dosis de estabilidad". Olivas repasó los principales indicadores económicos de 1997 y señaló que el pasado año, la economía valenciana creció un 3,5%, mientras que la inflación fue del 2,1. La estabilidad interna -basada en la moderación de precios y salarios y en la reducción de tipos de interés y del paro- junto a la externa -el tipo de cambio de la pesetas se ha mantenido estable en los últimos meses-, fueron las claves que el consejero citó para justificar la buena marcha de la economía valenciana. En 1997, el Índice de Precios al Consumo (IPC) se situó en el 2,1, mientras que los salarios crecieron un 3,6%. Por sectores, la industria fue el principal motor del crecimiento, con un aumento del 4,7% frente al 3,5 % de incremento medio de la economía valenciana. También la construcción tuvo un buen comportamiento, mientras que la agricultura fue el que peor parado salió, fruto de una caída de los precios. En el sector servicios destacó el turismo, que registró un incremento del 3,4 % durante el pasado año. El descenso de la tasa de paro fue otro de los datos que el consejero valoró positivamente del último año. El consejero adelantó cuáles son las perspectivas del Consell para este año. Al margen del crecimiento general de la economía cifrado en un 3,9%, Olivas señaló que la inflación se situará en un 2,1 y el crecimiento de la industria rondará el 4,6%, la construcción un 4,3% y el turismo un 3,5%. La agricultura crecería apenas un 0,6%. Olivas insistió en la moderación salarial. A pesar de que el consejero desestimó la posibilidad de que se produzca un recalentamiento de la economía, los autores del informe de coyuntura advierten que el aumento del consumo interno, fruto de la bajada de tipos, el aumento del empleo y del poder adquisitivo, puede desembocar en tensiones inflacionistas que pongan en peligro la estabilidad económica. Las perturbaciones del mercado asiático y la puesta en marcha del euro son otros de los puntos delicados de los próximos meses.