Ningún partido alcanza el aprobado de los ciudadanos a tres meses de las elecciones

Los ciudadanos de la comunidad autónoma siguen guardando las distancias y muestran poco entusiasmo por sus partidos, líderes políticos y medios de comunicación. El listón parece estar muy alto y ninguna de las siglas del arco parlamentario alcanza siquiera el aprobado raspado. Entre los dirigentes, sólo el lehendakari, José Antonio Ardanza, supera esa puntuación, con un 5,5. Los niveles de confianza en los medios de comunicación son de los más bajos en toda la Unión Europea, aunque la atención que se les presta, sobre todo a la televisión, es elevada.

Estos son los principales datos revelados en la segunda entrega del sociómetro de primavera, hecha pública ayer por el gabinete de Prospección Sociológica de la Lehendakaritza. El PNV es, con un 4,7, la fuerza que más simpatías despierta, mientras UA y HB son las que tienen menos aceptación, con un 1,9 y un 2,1 respectivamente. La recogida de datos se efectuó en entrevistas individuales mediante cuestionario estructurado y cerrado a domicilio entre el 11 y el 20 de mayo, simultáneamente a la confrontación Aznar-Borrell en el Congreso, y con los candidatos a lehendakari ya designados. En fechas inmediatamente anteriores, ETA asesinó en Pamplona al concejal del PP Tomás Caballero y en Vitoria al subteniente de la Guardia Civil en la reserva, Alfonso Parada. La muestra fue de 606 personas en Álava, 1.274 en Vizcaya y 966 en Guipúzcoa. El error de la muestra se cifra en un 1,87 con un nivel de confianza de 95,5%. De la encuesta puede deducirse que el candidato a lehendakari por el PNV, Juan José Ibarretxe, no ha salido malparado de su primera medición de fuerzas: aunque no alcanza el aprobado, lo roza con un 4,5, desplaza de su segundo puesto a Carlos Garaikoetxea (4,2) y sólo se ve superado por el propio José Antonio Ardanza, el mejor valorado y el único a quien los ciudadanos otorgan un aprobado. Todos los líderes sin excepción han perdido posiciones y son peor vistos ahora que en el mes de febrero. El mayor descenso lo registran José María Aznar y el candidato a lehendakari del PP, Carlos Iturgaiz. Entre los partidos, EA sube en cada medición, y su líder Carlos Garikoetxea es el que menos estima ha perdido en estos meses, mientras el PSE recupera posiciones y también sube ligeramente IU. Sus candidatos a las elecciones de octubre, Nicolás Redondo y Javier Madrazo, respectivamente, tienen, sin embargo, una valoración del 3,4 y el 3,3, ambos por debajo de la que alcanzan sus respectivos partidos. La percepción que los encuestados tienen de la evolución de los acontecimientos en el País Vasco es mejor (5,2) que la que tienen del contexto general de España (4,8). La primera se mantiene en sus resultados anteriores, mientras la segunda ha perdido el aprobado que alcanzaba hace cinco meses. Quienes se sienten de derechas, tienen estudios superiores y se autodefinen de clase alta son los que más positivamente valoran la marcha de las cosas en ambos espacios. Pese a que los ciudadanos mantienen a raya a los partidos políticos y a sus líderes, son más benévolos y manifiestan un grado mayor de satisfacción con sus instituciones, sobre todo las autonómicas. Un 69% se muestra satisfecho -entre mucho y algo- con el Gobierno vasco, mientras el central sólo encuentra parecido grado de aceptación entre el 43% . Los medios de comunicación salen sólo un poco mejor parados que los dirigentes y partidos políticos. Se mantiene un grado de exposición alto a sus mensajes -el 79% de la población atiende a dos o tres medios de comunicación diariamente o varias veces por semana- pero la confianza es otra cosa. Un 42% no confía en ninguno de ellos y la televisión, cuyos informativos sigue diariamente un 73% de los encuestados, inspira desconfianza al 56%. La radio es el medio que goza de más credibilidad y la de la prensa escrita sube con el nivel de estudios. La desconfianza es de las más altas de toda la Unión Europea, en niveles similares a la que registran griegos e italianos. Esta segunda entrega del sociómetro de primavera arroja también luz sobre otros aspectos: las elecciones autonómicas son las más importantes para el 38%, a distancia de las generales, que lo son sólo para el 18% y las municipales, para el 15%. Sólo para el 20% los comicios de octubre tienen más trascendencia que los de hace cuatro años. Los resultados muestran también que cuatro de cada diez vascos, con predominio entre ellos de los más jóvenes y mejor instruidos, no consideran el voto como una obligación ciudadana ni piensan que emitirlo sea una condicion indispensable para adquirir el derecho a criticar a los políticos.