_
_
_
_

Piqué achaca a motivos electorales el frente común de los nacionalistas

Luis R. Aizpeolea

El portavoz del Gobierno, Josep Piqué, estrenó ayer su cargo con una crítica a sus socios nacionalistas. Piqué atribuyó a motivos electorales la creación de la plataforma nacionalista, cristalizada en la Declaración de Barcelona, suscrita por CiU, PNV y el Bloque Nacionalista Galego (BNG). También censuró al PNV por considerar como un "ataque a la libertad de expresión" el cierre del diario Egin y calificó de "extemporáneo" que Xabier Arzalluz calificase de "imperialistas españoles" al PP y PSOE.

, No lo tuvo fácil el portavoz del Gobierno el día de su estreno. Sus socios del PNV acababan de arremeter contra la decisión judicial de cerrar el diario Egin y, además, se reunían la víspera con CiU y el BNG en Barcelona para suscribir un documento en el que reclamaban el reconocimiento jurídico-político de las tres nacionalidades: Cataluña, País Vasco y Galicia.Piqué compareció con numerosas notas escritas y contestó con largas frases, tratando de evitar los titulares tajantes que ofrecía su antecesor, Miguel Ángel Rodríguez. Previamente, hizo, a modo de presentación, una declaración política de un cuarto de hora en la que aseguró que el Gobierno agotará la legislatura porque "aún quedan cosas muy importantes por hacer".

Citó, a modo de programa para la segunda parte de la legislatura, la reforma del IRPF, la profesionalización del Ejército, la reforma de la Administración de la Justicia, las reformas estructurales y el mantenimiento de una política antiterrorista "permanente, coherente y sólida" que "no permite que haya áreas de impunidad".

Piqué alabó la política de diálogo del Gobierno con los socios nacionalistas que le permite mantener una mayoría estable. En un terreno más preciso, aseguró que ya existía un preacuerdo sobre las líneas macroeconómicas de los presupuestos para 1999 y sobre las infraestructuras con CiU, tras los encuentros de Jordi Pujol con los ministros de Economía, Rodrigo Rato, y de Fomento, Rafael Arias-Salgado, celebrados esta semana. Confirmó que antes de las vacaciones se celebrará la anunciada reunión entre el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y el jefe del Gobierno, José María Aznar.

Con estas bases, Piqué trató de echar balones fuera y restar importancia a las discrepancias abiertas por el bloque nacionalista con el Gobierno con la Declaración de Barcelona. El portavoz dijo que los nacionalistas necesitan "enfatizar" su discurso ante la "proximidad electoral". "El diálogo político no se ve afectado por estos asuntos".

En este capítulo, contó con la asistencia del ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, que le acompañó en su primera rueda de prensa oficial como portavoz. Rajoy hizo un llamamiento a los partidos nacionalistas para que renovaran su discurso, "como han hecho los demás partidos", y a "no vivir de la reivindicación permanente".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Pique tampoco quiso dar importancia a las discrepancias con el PNV en materia antiterrorista, expresada ayer en la crítica nacionalista al cierre del diario Egin. Tras subrayar su desacuerdo con la interpretación del PNV del cierre como un "ataque a la libertad de expresión", Piqué señaló que "esto no es nuevo". A renglón seguido, alabó la política de colaboración del Gobierno con el PNV: "Ha dado resultados. Ha ayudado a la estabilidad y ha contribuido a aumentar el autogobierno vasco".

Extemporáneas

Todo lo más que se permitió Piqué fue calificar de "extemporáneas" las calificaciones de "imperialistas españoles" con el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, tildó la víspera al PP y al PSOE.También quiso extender su oferta de diálogo a los partidos de la oposición en temas de Estado, "especialmente con el PSOE". Insistió en que la política de diálogo del Gobierno con los socialistas debía mantenerse, al margen del caso GAL.

Con ello salió al paso de la interpretación que hizo el portavoz de Coalición Canaria (CC), José Carlos Mauricio, de unas palabras de José María Aznar en la reunión que mantuvo el martes en La Moncloa con los portavoces parlamentarios nacionalistas. Según Mauricio, Aznar había manifestado que no podrían normalizarse las relaciones con el PSOE hasta que finalizara el juicio de los GAL.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_