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España acuerda con el Reino Unido levantar las restricciones a Gibraltar en la OTAN

Miguel González

El Gobierno español ha llegado a un acuerdo con el británico para levantar las restricciones militares que España mantiene sobre Gibraltar en las operaciones y maniobras de la OTAN. Las concesiones incluidas en este acuerdo, que no se ha hecho público, son calificadas de "técnicas" por fuentes diplomáticas españolas, quienes sostienen que no afectan al contencioso sobre la colonia. La decisión elimina la amenaza de que Londres bloquee la puesta en marcha del cuartel de la OTAN en Madrid y facilita el entendimiento entre los dos países sobre el futuro del Peñón, según las mismas fuentes.

El pasado 2 de diciembre, en Bruselas, el Reino Unido levantó por sorpresa el veto que mantenía sobre la desaparición del cuartel general de la OTAN en Gibraltar y la creación del mando subregional de Madrid, lo que permitió aprobar la nueva estructura militar. Su puesta en marcha, sin embargo, sólo será posible cuando obtenga luz verde el plan de implantación de dicha estructura, en diciembre de este año, por lo que hasta ese momento pendía la amenaza de un nuevo veto.Aunque España nunca aceptó que tuviese que pagar contrapartidas por el cambio de actitud británico, delegaciones de los ministerios de Exteriores de los dos países reanudaron las conversaciones en enero pasado, ya sin la presión de la opinión pública.

Dichas conversaciones, rodeadas de gran discreción, han concluido con un acuerdo por el que España se compromete a levantar las restricciones militares a Gibraltar en el marco de operaciones y ejercicios de la OTAN.

Hasta ahora, España se negaba a participar en cualquier ejercicio aliado en el que las instalaciones militares del Peñón tuviesen alguna intervención. Eso significaba que los barcos participantes no podían atracar en el puerto gibraltareño, ni los aviones aterrizar en su aeropuerto y que tampoco podían emplearse los equipos de comunicaciones de la base británica de la Roca.

Roces en "Strong Resolve"

Ello ha dado lugar a numerosos roces entre los dos países, el último de los cuales se produjo en marzo pasado, con motivo del ejercicio Strong Resolve, en el que casi 28.000 militares de 20 países simularon una crisis en la Península. Para sorpresa española, el cuartel de Gibraltar, que todavía funciona aunque esté decidida su supresión, intentó colarse en las maniobras.Las trabas puestas por España al empleo de los medios militares del Peñón no siempre han sido entendidas por otros socios de la OTAN, de lo que se aprovechó el Reino Unido durante la batalla diplomática del pasado otoño para exigir su levantamiento. Finalmente, el Gobierno de Madrid ha accedido a suprimirlas, aunque sólo en el marco de la Alianza Atlántica y no cuando se trate de operaciones nacionales británicas.

El acuerdo incluye otras concesiones menores, como la regulación de los aterrizajes de emergencia en territorio español. Naturalmente, España nunca ha negado permiso a los aviones británicos para tomar tierra en sus aeropuertos cuando existía riesgo de accidente, pero les obligababa a regresar a sus bases y no permitía que continuasen hacia Gibraltar.

En cambio, no se ha accedido a la petición de Londres para que sus aviones militares puedan sobrevolar territorio español sin autorización previa, simplemente comunicándolo, como hacen los de Estados Unidos.

Tampoco se ha aceptado el levantamiento completo de las restricciones aéreas mientras no se aplique el acuerdo sobre el uso conjunto del aeropuerto de 1987, que bloquean las autoridades gibraltareñas. La eliminación total de las navales, que impiden tocar puerto español a los buques procedentes de Gibraltar, podría producirse a medio plazo, según las fuentes consultadas, pues tendrán carácter residual una vez excluidas las escalas de la OTAN y no afectan a la soberanía, como ocurre con el aeropuerto.

"Se han atendido todas las peticiones que no afectan al contencioso", dicen fuentes españolas, quienes confían en que este acuerdo influya en la respuesta británica a la propuesta de soberanía compartida del Peñón durante un largo periodo transitorio.

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Sobre la firma

Miguel González
Responsable de la información sobre diplomacia y política de defensa, Casa del Rey y Vox en EL PAÍS. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en 1982. Trabajó también en El Noticiero Universal, La Vanguardia y El Periódico de Cataluña. Experto en aprender.

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