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Incendios incontrolados por todo el país causan un desastre ecológico en Grecia

La ola de calor que venía asolando Grecia desde hacía cuatro días parecía que iba a remitir debido a la llegada de vientos del Norte cuando ayer comenzó una oleada de incendios. Desde ayer a mediodía, a lo largo de todo el país, no cesaron de aparecer focos que fuego que han arrasado bosques y pueblos sin que por el momento nadie se pueda explicar qué ha sucedido. Esta madrugada, una mujer había muerto y un número todavía sin determinar de pueblos habían sido devorados por las llamas. La situación adquirió categoría de verdadero desastre ecológico.Al cierre de esta edición, la situación estaba absolutamente fuera de control y no dejaban de aparecer nuevos focos, ante lo cual el ministro del Interior, declaró: "Todo parece indicar la existencia de un plan organizado de pirómanos".

El humo llegó a la propia Atenas a causa de la cercanía de los diferentes fuegos. Lugares como Tatoi, Vari, Dílesi, Baripopi o Neas Kifisiás, por nombrar algunos, se encuentran tan sólo a 20 o 30 kilómetros de la capital griega. En el antiguo teatro de Epidauros, en el Peloponeso, la actuación teatral de la noche fue cancelada a causa de la existencia de fuego en el cercano Soficón.

Mientras tanto, en el norte de Grecia se declaraba otro incendio en la región de Halkidikí, y la carretera nacional Atenas-Larisa se cortaba constantemente a causa del fuego entre el kilómetro 39 y 50. Al mismo tiempo un orfanato cercano a Vari era evacuado ante la fuerza de las llamas. Asimismo, miles de casas, todavía no se puede precisar el número, fueron abandonadas por sus dueños, después de intentar salvarlas hasta el último momento.

En algunos lugares, los vecinos tuvieron que luchar contra el fuego solos, debido a que todas las fuerzas del cuerpo de bomberos estaban absolutamente colapsadas ante la continua aparición de nuevos focos. Por otra parte, los fuertes vientos junto a las altas temperaturas, alrededor de los 42 grados centígrados, ayudaron a que el fuego se propagase todavía con más facilidad.

Llamamiento al Ejército

El primer ministro, Costa Simitis, presenció personalmente uno de los fuegos que provocó la destrucción de gran parte del pintoresco pueblo de San Constantino, a tan sólo 50 kilómetros de Lamía, donde el primer ministro estaba ofreciendo un mitin sobre los últimos avances económicos de Grecia. Desde allí, hizo un llamamiento para movilizar a todo el cuerpo de bomberos y al Ejército para luchar contra el fuego.Sin embargo, a pesar de que el fuego todavía no había sido controlado en muchos puntos, algunos de los momentos más trágicos de la jornada se produjeron cuando las llamas se acercaban a la base militar de Ablona, una de las más grandes de los Balcanes y se temía que el fuego llegase a la munición. Un último cambio en la dirección del viento evitó el desastre.

También se temió que otro de los incendios, en esta ocasión en Pérama, en el puerto del Pireo, provocase una explosión en unos depósitos de gas natural. Una vez más, el cambio del viento ayudó a los vecinos de la zona que con el agua, el teléfono y la electricidad cortados iban a buscar agua al mar para evitar la explosión.

El servicio meteorológico anunció que los vientos continuarían durante toda la noche. Las autoridades despacharon a varias unidades del Ejército a colaborar con los bomberos y la televisión mostraba imágenes de casas ardiendo ante la impotencia de sus propietarios. La mayor parte de los fuegos seguía sin controlar y durante las próximas horas todas las fuerzas de seguridad del país se centrarán en sofocar cuanto antes una de las peores tragedias ecológicas que ha asolado a Grecia en los últimos años. La hora de las responsabilidades políticas vendrá después.

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