La zona situada entre el aeropuerto y la playa será reconvertida para construir un parque

VIENE DE LA PÁGINA 1 Tejedor fue el más transparente de los oradores de ayer. No usó nunca el presente de indicativo. Todas sus frases estaban construidas en condicional, incluida la que hacía referencia a su voluntad de creer en la palabra del ministro. Los máximos representantes de las administraciones tomaron la palabra para destacar la voluntad de acuerdo, la voluntad de pacto, la voluntad de construir la pista y acometer la ampliación del aeropuerto, la voluntad de respetar el medio ambiente, la voluntad de que todo sea perfecto. Ninguno de ellos dio datos específicos de cómo se plasmará tal cúmulo de voluntades. Arias Salgado subrayó la "urgencia" de la ampliación del aeropuerto y aseguró que se tendrá en cuenta el medio ambiente y que se construirá un parque entre el aeropuerto y la playa. Clos reconoció la fragilidad del encuentro al proponer que el acuerdo se prolongue en la tramitación del proyecto y que el pacto afecte a las conexiones de tierra y con el puerto. Tejedor, tras destacar la "generosidad" de El Prat, afirmó: "No tengo por qué dudar de la palabra del ministro; confío en lo escrito y en lo no escrito". Y advirtió contra las prisas de ayer tarde: "Lo importante no es empezar, lo importante es llegar al final". Pujol, tras afirmar la importancia del respeto al medio ambiente, aseguró que la ciudadanía también reclama la creación de riqueza y la disminución del paro, objetivos ambos a los que debe colaborar la obra. El presidente catalán añadió que no se trabaja a seis meses vista, sino para la próxima década: "El proceso es largo, empecemos hoy mismo", dijo. Representantes de la asociación ecologista Depana manifestaron su rechazo al acuerdo. Depana considera que la ubicación de la pista asegura que la zona asfaltada no llegue a las zonas protegidas, pero no evita que los aviones sobrevuelen a baja altura zonas de vital importancia ecológica.