Los socialistas reclaman que Castilla y León y Euskadi acuerden la prestación de servicios a Treviño antes de un año

Los socialistas de las comunidades del País Vasco y de Castilla y León han adoptado una postura común acerca del conflicto del enclave de Treviño. Su objetivo principal es aparcar de momento la discusión sobre el referéndum solicitado por los vecinos para anexionarse a Álava y fijarse primero en las necesidades inmediatas de los dos municipios del condado. Para ello, ambas federaciones socialistas proponen que se firme un convenio entre las instituciones de las dos comunidades para "la gestión y prestación de servicios a los ciudadanos" de Treviño y La Puebla de Arganzón. Tal acuerdo, según su criterio, debería cerrarse antes de que concluya la actual legislatura municipal, en mayo de 1999. Esta propuesta ratifica la iniciativa del PSOE llevada al Senado el pasado 18 de mayo por Juan José Laborda y aceptada en principio por el PP, en la que se apuesta por hablar del futuro político una vez encarrilados los problemas de servicios en el condado. Los socialistas de las dos comunidades directamente implicadas concretaron ayer los plazos: creen necesario esperar "una vez transcurridos unos dos años de la próxima legislatura" para tener en cuenta la desanexión a Burgos del condado. Esto significaría aplazar el proceso hasta mediados del año 2001. En ese tiempo, el PSOE considera que se debería escuchar "la voluntad de las instituciones implicadas y la de los ciudadanos de los municipios del enclave", según comentó ayer Fernando Buesa, secretario general del partido en Álava. Los habitantes, no obstante, ya expresaron el 8 de marzo su deseo de participar en un referéndum. Los socialistas concretarán hoy otra iniciativa, al presentar en la Junta de Portavoces del Parlamento vasco una solicitud para el establecimiento de relaciones entre representantes de las cámaras vasca y castellano-leonesa. Precisamente las Cortes de Valladolid, donde se ha creado una ponencia sobre Treviño, pidieron la semana pasada una reunión con representantes del Parlamento para acercar posturas. Reunión Parlamento-Cortes El Parlamento vasco aceptará hoy la invitación de las Cortes de Castilla y León para mantener una reunión, según informa Europa Press. El PSE, Partido Popular, Izquierda Unida y Unidad Alavesa están a favor de la reunión, mientras que Eusko Alkartasuna se decidirá escasas horas antes y el PNV se opondrá argumentando que ya se ha solicitado dos veces una convocatoria de la Comisión Mixta sin que respondan las autoridades castellanas.En este sentido, el PSE criticó la actitud del Partido Popular y del PNV en el proceso. Al primero, le acusó de alentar la crisis en el Ayuntamiento de Treviño, que según Buesa "corre el riesgo de quedar inoperante" tras la dimisión del alcalde y los concejales del PP. En este momento están al frente de la corporación los ediles independientes, con un alcalde en funciones. Buesa también censuró a los dirigentes populares de Burgos porque "en los once años que lleva gobernando no ha asumido su responsabilidad en la búsqueda de una solución". Los socialistas tampoco comparten la actitud del PNV de proponer "unilateralmente seguir el procedimiento de agregación previsto en el Estatuto de Autonomía" vasco, lo que consideró "una irresponsabilidad impropia de un partido gobernante".