El Gobierno culpa a la Junta del deterioro de 30 cuadros del Bellas Artes de Málaga

El secretario de Estado del Ministerio de Cultura, Miguel Ángel Cortés, lanzó ayer en Málaga una buena tanda de descalificaciones contra la Junta, a la que acusó de "utilizar la táctica del calamar para eludir sus responsabilidades" con el Museo de Bellas Artes y "manipular a la opinión pública". La Junta, como responsable de la gestión del museo, debe responder por el deterioro preocupante de, al menos, 30 cuadros de la pinacoteca, según Cortés.

Cortés visitó el antiguo Convento de la Trinidad, edificio elegido por el Estado para instalar el Museo de Bellas Artes y las obras en la Casa Natal de Picasso, que serán inauguradas por los Reyes el próximo 22 de junio. El secretario de Estado prometió asimismo dinero y plazos para que la Trinidad acoja por fin al Bellas Artes: un mínimo de 1.300 millones y un máximo de tres años para su apertura. Si bien se quejó continuamente del exceso de politización en temas culturales -"en el Parlamento, en la anterior legislatura, todos acordamos que la cuestión del patrimonio quedaba fuera de la pendencia política", dijo- Cortés no enterró el hacha de guerra en ningún momento. Según el secretario de Estado del PP, el movimiento en favor de la Aduana se ha defendido "con argumentos cubiertos de progresismo e intelectualismo a la violeta y sólo por crear dificultades políticas". "La Trinidad está a siete minutos del centro a pie, ¿qué es eso de que la gente no va a venir? Ellos están defendiendo la instalación de un museo en la zona donde el metro cuadrado de terreno es más caro. Critican que no pongamos un museo cerca de las joyerías del centro", añadió Cortés, quien admitió que "cuando la Aduana deje de tener uso administrativo, tendrá razonablemente uso cultural". Pero su acusación mayor se centró en responsabilizar a la Junta del penoso estado de conservación de 30 cuadros de la colección del Bellas Artes. Cortés mostró varias fotografías de cuadros y detalles de lienzos del Bellas Artes con visibles deterioros y hasta roturas en los lienzos. "Hemos comprobado que tenían muchas obras en estado lamentable, varias depósitos del Prado; la responsable de la gestión y cuidado de esas obras es la Junta, así que las críticas sobre el estado de los cuadros durante el embalaje y sobre las instalaciones del Palacio de la Aduana sólo pueden responder a la mala intención: ese almacén tiene mejores instalaciones que cualquier otro museo de España", afirmó el secretario de Estado del Ministerio de Cultura. Sobre los plazos y coste de la rehabilitación del convento de la Trinidad, el edificio cristiano más antiguo de la ciudad, para transformarlo en Museo de Bellas Artes, Cortés aclaró que se partía de una inversión inicial de 1.300 millones de pesetas y un plazo máximo de tres años. "Intentaremos que se acelere", comentó el secretario de Estado sobre este plazo. Cortés aseguró que el estudio museográfico sobre el Bellas Artes enviado por los técnicos de la Junta, al que tildó como un documento con algunas cosas útiles y mucha faramalla", concluye que "la Trinidad es el edificio idóneo para el Bellas Artes", y recordó que no tenía sentido criticarlo cuando triplica el espacio expositivo de Buenavista (de 2.000 a 6.000 metros cuadrados). El secretario de Estado del Ministerio de Cultura manifestó, por fin, que la intención del Ministerio no es desvalijar sino reforzar la política de depósitos "siempre y cuando se tenga muy claro que son depósitos, es decir, que el Prado cada vez que lo desee puede disponer de ellos". Cortés aclaró que los cuatro cuadros reclamados que están aún en Madrid "se están restaurando y a eso no se le puede llamar expolio".