Quinta mujer de ETA muerta en choque policial

Ignacia Ceberio Arruabarrena es la quinta mujer de la organización terrorista que ha muerto de forma violenta en el transcurso de enfrentamientos policiales. Bakartxo Arzelus fue la primera y años después siguieron su misma suerte Lucía Urigoitia, Teresa Pérez Sever y Susana Arregui.Tres ikurriñas con crespón negro y media docena de carteles relatando la muerte de Ignacia Ceberio eran todos los signos externos que se apreciaban la mañana de ayer en Lizartza, municipio guipuzcoano distante unos 26 kilómetros de San Sebastián en el que nació hace 35 años la presunta miembro de ETA fallecida en la madrugada de ayer.

En los soportales del Ayuntamiento y pegado en el tablón de la entrada al consistorio un pequeño cartel en euskera comunicaba a los vecinos su particular versión sobre la muerte de la hija de los habitantes del caserío Zulartetxe.

"La han matado disparándole tres tiros en la espalda, cabeza y cuello", se asegura en el pasquín. Algunos de los habitantes no cuestionan esta versión y, por contra, dudan de la información facilitada por la consejería de Interior. Dicen que el pueblo no perdona ese tipo de acciones. "Otras veces ha pasado igual y no te puedes creer lo que dice ese Atutxa", aseveraba otro de los vecinos.

El municipio está gobernado por Herri Batasuna, que tiene cuatro de los siete concejales del Ayuntamiento. En la fachada principal del consistorio ondeaban en la mañana de ayer tres banderas: la de Lizartza, la ikurriña y la de Irlanda junto a dos grandes carteles en los que se reclamaba el traslado de los presos de ETA a Euskadi.

El alcalde, José Antonio Mintegi Arrate, de Herri Batasuna, rige un municipio en el que 264 de sus 643 habitantes le votaron en las últimas elecciones municipales. El Partido Popular consiguió siete votos e Izquierda Unida, sólo uno.

Ignacia Ceberio residió en un caserío de Lizartza hasta agosto de 1995, fecha en la que la policía descubrió su presunta relación con ETA y huyó del municipio. El vehículo de su hermano, Javier Ceberio, fue utilizado por el comando Donosti para cometer un atentado contra la casa cuartel de Arnedo (La Rioja) en 1995.

Además, y tras la detención del etarra Valentín Lasarte, la Ertzaintza supo que en mayo de ese mismo año Ceberio había prestado una vivienda en Ibarra (Guipúzcoa) para que se refugiasen el propio Lasarte y sus compañeros del comando Donosti, Xabier García Gaztelu y Juan Ramón Carazatorre.

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón tiene dos sumarios abiertos contra Ceberio: por el atentado con explosivos contra la cuartel de la Guardia Civil de Arnedo y otro por participar en diversas actividades del comando Donosti.

La fallecida comenzó a colaborar con ETA en 1991, según la policía. En ese año captó a Fernando Elejalde, quien ha sido condenado recientemente por el asesinato del funcionario de prisiones de Martutene Francisco Javier Gómez Elósegui.

La capilla ardiente por Ignacia Ceberio se instalará hoy en el Ayuntamiento de Lizartza. En Gestoras pro Amnistía se ofreció ayer una rueda de prensa en la que se exhibieron carteles en los que se leía "PNV, esta muerte la podíais haber evitado". Gestoras ha convocado para el domingo un acto político en que se rendirá un homenaje a la fallecida.