La Conferencia Monetaria reconoce que las fusiones implican riesgos

La Conferencia Internacional Monetaria que finalizó ayer en Viena tuvo en el proceso de fusiones que registran las economías desarrolladas uno de sus puntos más discutidos. Como conclusión, los representantes de la gran banca reconocieron que las fusiones favorecen a los consorcios internacionales, pero no están exentas de peligros. El euro, aseguraron, favorece la tendencia a las grandes fusiones en Europa.

Michel Pebereau, directivo de la Banque Nationale de París (BNP), aseguró en su intervención ante la conferencia, a la que pertenecen 104 bancos de todo el mundo, que el euro y la creciente competitividad reforzarán la actual tendencia a la concentración de empresasComo datos, señaló que entre 1989 y 1995 el número de entidades bancarias en Francia se redujo un 40% ,y en Estados Unidos y Reino Unido, un 30%. En Francia, cuatro bancos dominan el 40% del mercado.

La fusión de instituciones bancarias como consecuencia del euro y las crisis financieras en Rusia y en Asia fueron los temas predominantes en esta conferencia, iniciada el martes con la participación de gobernadores, presidentes y directores de los mayores bancos comerciales y emisores del mundo.

El lunes se celebró una sesión a puerta cerrada en la que participaron Alan Greenspan (presidente de la reserva federal de EEUU), Wim Duisenberg (Banco Central Europeo), Hans Tietmeyer (Bundesbank), Jean-Claude Trichet (Banque de France), Eddie Gorge (Bank of England), Yutaka Yamaguchi (Bank of Japan) y Klaus Liebser (Banco Nacional Austriaco).

En un ambiente poco polémico, en el que los banqueros asintieron incluso a las palabras del jefe del Gobierno austriaco, Viktor Klima, a favor de la convergencia fiscal, el asunto que provocó la mayor divergencia de opiniones fue la evaluación de la crisis en Rusia y sus repercusiones. Lawrence Summers (subsecretario de Finanzas de EEUU) no descartó que el FMI pase apuros por esta nueva crisis.