García Damborenea afirma que no cambió su declaración después de hablar con Aznar

Ricardo García Damborenea reconoció ayer en el Tribunal Supremo que ha hablado "muchas veces" con el presidente del Gobierno, José María Aznar, y algunas menos con el vicepresidente Francisco Álvares Cascos. Sin embargo, aseguró que sus contactos con Aznar no le influyeron para cambiar sus anteriores declaraciones e imputar al expresidente del Gobierno Felipe González y otros altos cargos socialistas en la guerra sucia contra ETA.

El ex secretario general de los socialistas vizcaínos, García Damborenea, afirmó ayer que cortó sus relaciones con el PP tras verse involucrado en el sumario del caso Marey, entre finales del año 1994 y enero de 1995. Respondió así ante una pregunta del abogado de Rafael Vera, Manuel Cobo del Rosal, que quería saber si aquel habló con José María Aznar antes de que, el 20 de julio de 1995, cambiase sus primeras declaraciones sobre el caso Marey para implicar en él a altos cargos de Interior.El procesado reconoció que ha conversado muchas veces con el presidente Aznar, entre otras razones porque le conoce desde hace muchos años, ya que ambos llegaron a las Cortes en las mismas fechas. Sin embargo, puso especial énfasis en aclarar que ha hablado muchas menos veces con el vicepresidente Álvarez Cascos.

Como no podía ser menos, el exdirigente del PSOE de Vizcaya reconoció que participó en Zaragoza en un mitin electoral para los comicios europeos de 1994, en los que salió "¨cogido de la mano" del presidente del PP. "Sí, lo hice para recomendar el cambio de Gobierno", aceptó García Damborenea.

Sin embargo, al ser preguntado sobre si habló con Aznar antes de cambiar su primera declaración en el caso, contestó que cortó toda relación con el PP entre 1994 y enero de 1995, al igual que sus colaboraciones en prensa y radio. "No me gusta imponer su presencia cuando ésta puede ser mal vista y perjudicar a terceros", argumentó.

Damborenea recordó con extraordinaria precisión su fecha de ingreso en prisión -el 17 de febrero de 1995- por orden del juez Baltasar Garzón y que tampoco entonces mantuvo ningún contacto conel actual presidente del Gobierno, José María Aznar.

"¿Terminó usted mal con el PSOE?", inquirió Cobo del Rosal. "No, no, seguí...". Curiosamente, García Damborenea no pudo recordar el nombre del dirigente socialista con el que compitió en el País Vasco por la secretaría general, antes de fundar su propio partido (Democracía Socialista). "Yo perdía siempre...", alegó el procesado.

Pese a implicar a Barrionuevo en la guerra sucia, el exdirigente socialista reconoció que está "vivo" gracias a él, y además, que si puede le echará una mano.

El juicio por el secuestro de Marey seguirá hoy con la declación del ex gobernador civil Julián Sancristóbal, cuya declaración se considera fundamental para aclarar muchos de los puntos oscuros y las contradicciones de sus compañeros de banquillo. El ex subcomisario José Amedo deberá someterse a una prueba de escritura para cotejarla con un documento supuestamente escrito por él en que critica al juez Baltasar Garzón.