La Comisión Europea prevé un fuerte descenso en las ayudas al empleo que recibe España
ENVIADO ESPECIALLa reforma del Fondo Social Europeo (FSE), cuyo pistoletazo de salida se ha dado en la reunión de este organismo en Birmingham (Reino Unido), no pinta oros para España, el mayor perceptor de estas ayudas. Además de hacer incompatibles algunas, la Comisión prevé que los fondos para regiones con baja renta o en declive industrial cubrirán en el año 2006 a un 40% de la población, frente al 51% actual.
La propuesta figura en un documento de la Comisión Europea titulado Guía para la nueva regulación de los fondos estructurales. La previsión que hace la Comisión es que "la proporción del conjunto de la población cubierta por los objetivos 1 y 2 debería reducirse gradualmente desde el actual 51% hasta una horquilla entre el 35% y el 40% en el 2000". Bruselas quiere que el acuerdo para la reforma del FSE para el periodo 2000-2006 esté listo en un año.Esta propuesta se suma a la que hizo el martes en este foro el comisario de Empleo y Asuntos Sociales, el irlandés Pradaig Flynn, para que las regiones que perciben ayudas al empleo por tener una renta inferior al 75% de la media comunitaria o están en declive industrial, no puedan acceder al nuevo fondo que se quiere crear desde el año 2000.
Hay un dato que no se le escapa a nadie en este debate sobre la reforma del FSE, la principal herramienta de apoyo al empleo que tiene la Comunidad. La discusión comienza a año y medio de que acaben los seis del actual modelo de financiación, pero también cuando se da por seguro que varios países del Este entrarán en la Unión Europea en los primeros años del próximo siglo. La mayoría de estos potenciales socios tienen rentas inferiores al 75% de la media comunitaria.
Flynn asegura que el debate sobre la reforma está empezando y que el FSE tendrá más dinero en los próximos años: de 60.000 a 70.000 millones de ecus entre el 2000 y el 2006 (unos 11,7 billones de pesetas), frente a 47.000 millones de ecus entre 1994 y 1999. Flynn recuerda que queda por debatir lo principal, el reparto de los fondos a partir del año 2000, y afirmó, ante los participantes de los 15 países comunitarios reunidos por el FSE, que su objetivo es llegar a un acuerdo a principios de 1999.
Con el actual sistema, España recibirá entre 1994 y el año 2000 un total de 6.074 millones de ecus (1,01 billones de pesetas) para las ocho comunidades autónomas con rentas inferiores al 75% de la media comunitaria. Para zonas en declive industrial, España recibe 352,6 millones de ecus (59.200 millones de pesetas).
En la actualidad, siguiendo la tecnocrática clasificación comunitaria, los fondos del FSE se distribuyen siguiendo siete grandes objetivos. La Comisión plantea reducir estos objetivos a tres. Para el objetivo 1, se mantiene el criterio de que reciban fondos las zonas con una renta inferior al 75% de la media, pero al tiempo se apunta que, a largo plazo, la población que se beneficie de esta ayuda será menor que la actual. Para el objetivo 2, se mantiene el criterio de reparto para zonas en declive industrial, pero la novedad es que la Comisión quiere incluir en este objetivo zonas "en las que la pesca es esencial para su economía".
Los objetivos 3, 4, 5 y 6 se agruparían en uno. El nuevo objetivo trataría de ayudar "al empleo, la formación profesional y a las personas con dificultades para encontrar trabajo". España, que ahora recibe unos 247.000 millones por este capítulo, no tendrá acceso a este objetivo, ya que se pretende que sea incompatible con las regiones que perciben ayudas por menor renta o por declive industrial.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.