El juez prohíbe salir de España al anestesista imputado por el contagio de hepatitis C en Valencia

Juan Maeso, el anestesista imputado en relación con el contagio de hepatitis C en dos hospitales de Valencia, tiene prohibido salir del territorio nacional. Así lo determinó el pasado lunes el juez encargado de investigar el caso, el titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Valencia, quien, a petición del fiscal adscrito a la causa, también ordenó que el médico esté permanentemente localizado. Al mismo tiempo, el juez decretó para el anestesista la libertad provisional sin fianza.Maeso deberá por tanto presentarse una vez por semana ante las autoridades competentes, aunque, a petición de su letrado, podrá personarse, indistintamente, en el juzgado de guardia, ante las autoridades de su localidad (Rocafort, a seis kilómetros de Valencia) o ante la instancia que entiende el caso.

Todas estas medidas, de carácter cautelar y, obviamente, encaminadas a garantizar la localización de Maeso, le fueron comunicadas al anestesista la tarde del pasado lunes, cuando el facultativo se personó, de manera voluntaria y asistido por su abogado, en el juzgado que lleva la causa que empezó la semana en funciones de guardia.

El juez y el fiscal aprovecharon la improvisada comparecencia del anestesista para comunicarle su nueva situación legal: la de imputado. Esta decisión del juez responde a la existencia, tal como aseguró ayer el magistrado, de «indicios que permiten atribuirle (a Maeso) la comisión de hechos que podrían ser constitutivos de delito».

Por ello, por la «existencia de hechos que podrían derivar en responsabilidad penal», la autoridad judicial decidió imputar a Maeso, que así tendrá la posibilidad de salvaguardar sus derechos constitucionales: declarar con la asistencia de un letrado, responder únicamente a aquellas preguntas que le parezca oportuno o, incluso, no declarar.

Próxima comparecencia

De momento, Maeso no ha sido citado aún. Aunque fuentes cercanas al caso aseguraron que el anestesista será llamado a declarar «en los próximos días, de manera inminente», su comparecencia no se producirá hasta que el instructor del caso estudie de manera exhaustiva los mil folios del expediente que obra en su poder. En esta documentación, entre otros, figuran cerca de 80 denuncias y los informes remitidos por Sanidad. Éstos apuntan una relación directa entre Maeso y los pacientes contagiados.Según los datos aportados ayer por el consejero de Sanidad, Joaquín Farnós, los expertos en genética han secuenciado hasta el momento el virus de 56 pacientes infectados, cuyo genotipo (el 1-A) es idéntico al del anestesista Juan Maeso.

En todos ellos queda demostrada la relación filogenética que, según las autoridades sanitarias, demuestra el origen común del contagio. Fuentes sanitarias aseguraron que se han realizado otras seis secuenciaciones de virus con genotipo 1-A en las que no se aprecia relación filogenética. Se trata en todos estos casos, de pacientes que no fueron anestesiados por Maeso.

Hasta el momento lo que se estudia es la región NS5B del virus (la zona menos variable del VHC, que es un virus altamente mutante). La segunda fase de la secuenciación se centrará en el estudio de las regiones más variables. En los seis casos de genotipo 1-A que no guardan relación con el anestesista no se demuestra relación filogenética, ya que la zona NS5B «no sale igual», según las mismas fuentes.

Según el doctor Rafael Esteban Mur, que ayer participó en el VIII Congreso de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica, celebrado en Palma de Mayorca, el brote de hepatitis C detectado en Valencia «se ha producido por mala práctica clínica de un anestesista que pinchaba a los pacientes con la misma aguja que se pinchaba él».

Según informa Europa Press, Esteban Mur, del hospital Vall d"Hebrón de Barcelona, señaló que «no estamos ante una infección nosocomial (intrahospitalaria) sino ante una infección por hacer las cosas mal. Intentar prevenir esta situación es muy complicado, casi imposible», dijo.

Por otra parte, el PSOE pidió ayer «responsabilidades» al Ministro de Sanidad, José Manuel Romay Beccaría, acerca del brote de hepatitis C. Una diputada socialista, Marina Bartolomé, interpeló ayer al ministro acerca del mal funcionamiento «de los servicios de vigilancia epidemiológica», sobre cuya gestión también tiene competencias el gobierno central.