El Consejo Vasco de la Abogacía da el visto bueno a una polémica tasa colegial

Un año después de que saltara la chispa dentro del Colegio de Abogados de Álava por la retirada de una tasa denominada bastanteo, el Consejo Vasco de la Abogacía ha emitido una resolución en la que autoriza el establecimiento de una cuota que no discrimina a los letrados más jóvenes frente a la oposición de un importante grupo de los colegiados alaveses. El intento de eliminar el cobro de esta cantidad por actuación profesional, auspiciado desde la dirección de la asociación, puso en pie de guerra a un centenar de letrados.

Al final, los abogados jóvenes de Álava han conseguido que el órgano máximo de los abogados vascos legitime una tasa similar a la que estaba ahora en vigor. La fractura que se ha producido durante cerca de un año en la asociación generó dos posturas antagónicas entre los profesionales de la abogacía en Álava que finalmente encontró una salida consensuada en una asamblea desarrollada el pasado mes de noviembre. "El origen de este conflicto fue un órdago que lanzaron los procuradores al colegio de abogados por el bastanteo", señala uno de los letrados jóvenes. El bastanteo era un poder que cobraban los procuradores a los clientes por iniciar un proceso de tramitaciones, y que a principios del año pasado decidieron no gestionar y dejarlo en manos de los abogados. Al tratarse de una tasa proporcional que iba a parar a las arcas del Colegio de Abogados ejercía un papel compensatorio -quien más asuntos llevaba aportaba más dinero-. Por ello, la decisión de eliminarla, auspiciada desde la Junta de Gobierno, fue interpretada por los letrados de menor edad y experiencia como un intento de blindar el colegio a nuevas incorporaciones y mantener los privilegios de los más veteranos, ya que la cuota anual ascendería de las 29.000 a las 90.000 pesetas. La asamblea que se desarrollo el 9 de abril en donde se resolvió eliminar esta tasa fue impugnada por un centenar de letrados, que presentaron un recurso ante el Consejo Vasco de la Abogacía por un defecto de forma. El decano de los abogados alaveses, JoséVidal-Sucunza, presidió durante el pasado año el Consejo Vasco de la Abogacía, pero se distanció en todo momento de las decisiones que afectaban al colegio alavés "por imparcialidad". El órgano profesional estimó este recurso el 4 de junio, y la Junta de Gobierno del colegio decidió convocar una nueva asamblea para decidir el sistema de financiación. Esta nueva reunión "que se llevó a cabo con urnas, controlando la asistencia, y de una manera mucho más organizada con todos los parabienes formales", tuvo una asistencia masiva en el marco de una asociación que cuenta con 800 colegiados. Tras presentarse cuatro alternativas se aprobó una póliza por intervención profesional diferente al bastanteo, "pero que conserva la misma filosofía", señalan. Se aportan 20.000 pesetas fijas y a partir de ahí financia el colegio quien más trabaja. "Había quienes nos llamaban egoístas porque decían que a los más jóvenes y con menos asuntos nos tenían que financiar el colegio otros", indica uno de los abogados de menor edad. La postura adoptada por la Junta del colegio "no fue única" en esta reunión: "Se les había caído el mundo encima cuando recurrimos la desaparición del bastanteo, pero luego tuvieron un giro y buscaron una solución pactada", indica un colegiado. Recurso ante lo contencioso Sin embargo, el asunto no quedó ahí, y un grupo de letrados de gran peso dentro de la asociación profesional recurrió la resolución ante el Consejo Vasco de Abogacía. Se trataba especialmente de abogados que trabajan con compañías de seguros y con bancos "que les cuestionan el aumento de sus minutas por cuestiones de pólizas". El Consejo de la Abogacía resolvió el pasado mes de marzo apoyar el acuerdo de la asamblea de noviembre y desestimar el recurso, decisión que no ha marcado aún el punto final de la polémica ya que los recurrentes han anunciado su voluntad de acudir ante la sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco. La lentitud de este procedimiento no impide que se aplique el nuevo sistema de manera inmediata, lo que ha calmado los ánimos dentro de un colectivo que ha vivido un año especialmente tenso.