El futuro museo de Vitoria genera nuevas diferencias entre instituciones

La Diputación de Álava adjudicará a finales de este mes la realización de un proyecto donde se defina el tipo de gestión que se deberá llevar a cabo en el futuro Museo Vasco de Arte Contemporáneo de Vitoria. Esta iniciativa del departamento de Cultura, cuyo titular es Mikel Mintegi (Eusko Alkartasuna), parte con las reticencias del Gobierno vasco. Las dos instituciones difieren en el uso que se debe hacer de la pinacoteca. Desde el organismo foral se defiende la idea del centro-museo, esto es, que además de exponer los fondos se fomenten actividades culturales entre el público y los especialistas. Además, Mintegi pretende hacer una separación de las tres colecciones que componen el actual Museo de Bellas Artes de Vitoria: arte costumbrista, sacro y contemporáneo. Según su criterio, el futuro centro sólo debería acoger la última, alojada en gran parte en los sótanos de la pinacoteca. El Gobierno vasco no comparte estas ideas. El departamento de Mari Carmen Garmendia cree más conveniente un museo -sin centro cultural- limitado a exhibir colecciones, ya que el otro sistema implicaría unos elevados costes. El proyecto que ahora ha sacado a concurso la Diputación podría aclarar cuál de las dos fórmulas es más viable. El día 20 se abrirán las plicas y se adjudicará a finales de mes, con un presupuesto de 37 millones de pesetas. La empresa consultora deberá terminarlo para el 15 de octubre, fecha que se ha fijado Mintegi para aclarar definitivamente el futuro del Museo. Sin embargo, al tener en cuenta esta fecha, el diputado no tomó en consideración la coincidencia con el calendario electoral en el Ejecutivo autónomo, lo cual puede entorpecer el proceso. Costes del museo El estudio de viabilidad se centrará en cinco puntos concretos. Aclarará, por una parte, el diseño más adecuado en cuanto a la gestión museística, así como las necesidades tanto materiales como humanas para desarrollarlo. Se planteará también qué tipo de coordinación se necesitará con otros centros, tanto de la provincia como otros limítrofes, especialmente el Guggenheim. El proyecto también debe definir los gastos del futuro museo, tanto en la gestión como un avance de lo que puede suponer la construcción del edificio. La antigua estación de autobuses se ha elegido como lugar para el museo. El Ayuntamiento de Vitoria ha iniciado los trámites para poder instalar en los bajos tres plantas de aparcamiento, que servirán como base para el proyecto arquitectónico. De él se encargarán, según las previsiones de la Diputación, el servicio de Arquitectura de la propia institución foral. Ese mismo departamento ya realizó un primer proyecto, más tarde desechado. Mintegi cree factible que el estudio museístico pueda realizarse simultáneamente a los primeros pasos del plan urbanístico.