El Gobierno destina 1.700 millones a carreteras del plan nuclear previstas para 1992

Protección Civil espera concluir en el año 2000 la adecuación de la red viaria incluida en el Plan de Emergencia Nuclear de Tarragona (Penta) para facilitar la posible evacuación de los municipios cercanos a las plantas atómicas de Ascó y Vandellòs, para lo que ha destinado 1.700 millones de pesetas a la ampliación de carreteras. El convenio firmado en su día entre las administraciones central, autonómica y provincial preveía terminar estas infraestructuras en 1992.

El director general de Protección Civil, Juan San Nicolás, anunció ayer que el Gobierno invertirá en los dos próximos años en la provincia de Tarragona 2.440 millones de pesetas para solucionar las carencias incluidas en el Penta. De esta cantidad, 1.700 millones corresponden a la ampliación de carreteras de las áreas de Ascó y Vandellòs, en concreto las que comunican las poblaciones de El Molar y Garcia, La Palma d"Ebre con Flix y Riba-roja, y las variantes de Miami Playa y L"Ametlla de Mar en la nacional 340. Otros 590 millones de pesetas se destinarán a la adecuación de caminos vecinales. El resto de la inversión, unos 150 millones de pesetas, se gastarán en la compra de equipos de emergencia nuclear como por ejemplo vehículos todoterreno, emisoras de radio, grupos electrógenos y para la construcción de las estaciones de clasificación y descontaminación de personas irradiadas. Ayer, Protección Civil donó a la Subdelegación de Gobierno de Tarragona un teléfono vía satélite para doblar, en caso de accidente nuclear, los sistemas de comunicación entre las centrales y los servicios de emergencia en caso de fallo de las líneas terrestres. Con los 1.700 millones de pesetas, el Gobierno central habrá invertido cerca de 8.000 millones de pesetas para la adecuación de las 26 carreteras incluidas en los planes de emergencia nuclear de la provincia de Tarragona. Sin embargo, Protección Civil todavía negocia con la Asociación de Municipios Afectados por centrales nucleares (AMAC) un paquete de 6.600 millones para solucionar todas las carencias de las siete zonas españolas que cuentan con instalaciones de energía atómica. El Gobierno central prevé terminar la negociación en los próximos meses para incluir esta cantidad en los presupuestos generales de 1999 y del año 2000.