El ex director gerente de La Fe se querellará contra Sanidad por irregularidades en la inspección

El ex director gerente del hospital La Fe, Enrique Trull, va a emprender acciones legales contra el consejero de Sanidad, Joaquín Farnós, por haber hecho pública su declaración ante los servicios de inspección. Farnós dijo la pasada semana en las Cortes Valencianas que, a principios de 1995, Trull mantuvo una conversación con el anestesista Juan Maeso y con el jefe del departamento de Anestesia y Reanimación del hospital, Rafael Montero, debido a los rumores sobre la supuesta adicción de Maeso a los opiáceos. Éste negó ser adicto, pero se tomó una baja de tres meses. El consejero extrajo esta información de la declaración confidencial de Trull, que afirma que quiso que su abogado estuviera presente "por si se hacía una utilización pública de lo que yo dijera". "No te dan un motivo para la citación, no hay un secretario de actas y después se comete la imprudencia de hacer pública la declaración", comenta Trull, que dice que aquella reunión de 1995 se produjo, pero que sólo estaba basada en rumores, pues no había base documental ni denuncia escrita para actuar contra el anestesista. Trull reta a Farnós a que diga si existe un análisis que demuestre que Maeso tenía hepatitis C antes del pasado 3 de febrero -cuando fue expulsado de los quirófanos de la Casa de Salud-y añade que "no se puede actuar contra nadie por ser portador del virus, salvo que se demuestre que hacía prácticas de riesgo". Trull asegura que desde que el PP ganó las elecciones en mayo de 1995, hasta que se enteró por la prensa de su destitución, ese verano, sólo pudo hablar una vez con Farnós, que nunca atendía sus llamadas. "Le llamé por un aviso de bomba en el hospital y me dijo que por la tarde podía localizarlo en la taberna Alcázar, porque no iba a estar en su despacho". "Ya me hubiera gustado poderme comunicar con él cuando yo quería", señala, en respuesta a la "conspiración de silencio" denunciada por el consejero.