La protesta infantil contra la suciedad, prólogo de la fiesta

, El alcalde acudió, como manda la costumbre en un día como ayer, a misa mañanera en la iglesia de los Santos Justo y Pastor, al lado de la plaza del Dos de Mayo. La banda municipal le recibió en la puerta atacando la canción Begin the begin. Para explicar la elección del tema, el director de la banda se limitó a decir: "Pues la tocamos porque está en el repertorio".

No sólo los músicos aguardaban al regidor a la puerta de la iglesia. Un grupo de vecinos, quejosos de que, tras las noches de juerga que los jóvenes celebran allí los fines de semana, la plaza amanezca llena de porquería y de que ésta no desaparezca hasta las doce o la una, preparó una protesta original: encargaron a sus hijos que le entregaran a Álvarez del Manzano unas fotos ilustrativas del estado de su plaza algunos sábados por la mañan. Adrián, de siete años, que se erigió como capitán del comando reivindicativo-infantil, escuchó a sus mayores y aceptó la tarea.

Terminó la misa, la banda empezó a tocar, ahora sí, los acordes de la florista que viene y va por la Puerta de Alcalá. Empezó a salir la gente y Adrián se acercó al gentío. El niño, que no conoce otro político que Aznar, entregó las fotos a un guardaespaldas. Éste sonrió y señaló al alcalde. Álvarez del Mazano, sonriendo también, aceptó las fotos, besó a los niños, escuchó de refilón y a toda prisa las críticas de los vecinos y se montó en el coche, rumbo a la Puerta del Sol. Allí, el regidor admitió que los vecinos tienen "parte de razón".

Medalla a El Corte Inglés

Media hora más tarde, el presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, impuso las medallas de oro de la Comunidad de Madrid a Isidoro Álvarez, presidente de El Corte Inglés, y al movimiento Jóvenes contra la Intolerancia.Álvarez, que incidió en la raíz madrileña de la empresa que dirige, destacó que El Corte Inglés "ha creado más de 26.000 puestos de trabajo en la Comunidad de Madrid". Por su parte, Esteban Ibarra, presidente de Jóvenes contra la Intolerancia, afirmó que la ciudadadanía de Madrid "ha sido la primera en reaccionar ante los nuevos fenómenos de violencia, racismo y xenofobia". Y terminó su discurso de agradecimiento citando a Martin Luther King y un nuevo sueño: "El sueño de hacer posible la paz".

Terminadas las intervenciones, y tras escuchar la Suite número 1 en sol mayor (BWV 1007) de Bach a manos del violonchelista español Pedro Corostola, las autoridades salieron a la Puerta del Sol. Allí esperaba el público. El alcalde, como el año pasado, volvió a citar a los héroes del Dos de Mayo y a recordar a los madrileños que los enemigos a batir ahora "son el paro y los narcotraficantes". Ruiz-Gallardón afirmó que la Comunidad de Madrid "no es una comunidad anecdótica". Después se oyó el casi desconocido himno regional, que no levantó muchos aplausos entre el público.