Rajoy hace oídos sordos a las demandas de traspasos de CiU y PNV

El ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, hizo ayer oídos sordos a las reclamaciones que le hicieron sus socios nacionalistas de CiU y PNV en la Comisión de Administraciones Públicas. Rajoy se negó a responder a las demandas de mayor inversión pública para Cataluña y a la presentación de los balances territoriales, formuladas por CiU, y a la cesión de la cuota de formación del Inem, que reclama el PNV.

Rajoy confirmó de forma clara la posición del Gobierno de frenar el proceso de grandes traspasos a las comunidades autónomas, como Cataluña y País Vasco. Los nacionalistas creen que esta posición, decidida por el propio José María Aznar hace meses, se verá aún más reforzada ante la dura actitud que mantiene con los nacionalismos el candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, José Borrell. El hecho es que ayer la diputada de CiU Carme Laura Gil no obtuvo ninguna respuesta del ministro al plantearle que su partido iba a reclamar un nuevo pacto fiscal cuando en el año 2001 se cumpla el quinquenio del modelo de financiación autonómica. Pero tampoco obtuvo respuesta alguna cuando la diputada de CiU aseguró que Cataluña recibe menos del Estado de lo que aporta. Recordó que en inversión pública, Cataluña en los últimos 16 años ha recibido el 9% del total a pesar de contar con el 16% de la población.

Ni siquiera respondió Rajoy a la diputada de CiU cuando le preguntó por el acuerdo del debate sobre el estado de la nación del año anterior de publicar la balanza fiscal, con la aportación y recepción de cada comunidad autónoma al Estado, y que el Gobierno no ha puesto en marcha.

La diputada del PNV Margarita Uría no tuvo mejor suerte que la de CiU. Manifestó que existía un frenazo autonómico y que el Gobierno sólo cedía gestión, pero no poder político a las autonomías, y denunció "el incumplimiento del Estatuto de Gernika". "Me ha decepcionado", dijo Uría.

Rajoy no respondió a las cuestiones concretas. Se limitó a generalizar. "Todas las comunidades pueden plantear sus reclamaciones, pero al final hay que pactar". También echó mano de la cifra de traspasos en lo que va de legislatura (149) para cuestionar que haya "frenazo autonómico".