La danza valenciana levanta el vuelo

Por fin fue presentado en sociedad. Ayer, en el Día Internacional de la Danza, la directora general de Promoción Cultural, Consuelo Ciscar, inauguró el Centre Coreogràfic de la Comunitat Valenciana, ubicado en Burjassot. Una gran sala diáfana, con parquet de madera y barras fijas sobre las paredes blancas, iluminada por diversas claraboyas por donde penetra la luz a raudales, denota la finalidad del edificio. Completan las instalaciones, una pequeña sala de ensayo y otras dependencias como la de documentación. El propósito es ofrecer a los profesionales valencianos de la danza un centro de perfeccionamiento en el que renombrados coreógrafos, principalmente de danza clásica, española y contemporánea, impartirán cursos y ayudarán en las producciones y coproducciones del Centre Coreogràfic. Pero la apertura del centro -retrasada varios meses- no oculta el desentendimiento del Ministerio de Cultura. El proyecto original, impulsado por la ex ministra de Cultura Carmen Alborch tenía un carácter nacional. Sin embargo, el ministerio ha desestimado implicarse finalmente y ninguno de sus representantes asistió ayer al acto de inauguración. Consuelo Ciscar restó importancia al hecho y apuntó que el Ministerio de Cultura colaborará en el funcionamiento del centro el próximo año. Además, señaló que concurrirá a las ayudas correspondientes que pueda obtener de la Administración central. Así pues, el Centre Coreogràfic depende directamente de Teatres de la Generalitat. Precisamente, la bailarina y coreógrafa Olga de Soto será la directora in pectore y encargada de su programación desde su cargo en el consejo rector de Teatres. Setenta millones de pesetas, es el presupuesto de este año. El director artístico de Teatres de la Generalitat, Juan Alfonso Gil-Albors, citó algunos de los coreógrafos con los que se quiere contar -Zambrano, Margarit, Parkinson y Saez, entre otros- y anunció la realización de un taller de comedia musical para junio. Sobre las futuras producciones, sólo comentó que se realizarán varias. También asistieron a la inauguración representantes del mundo de la danza involucrados en el proyecto. Algunos bailarines aprovecharon la coyuntura y pidieron más ayudas públicas para sacar a la danza valenciana de su estado de "precariedad". Otros comentaron la idoneidad del proyecto "si cumple su cometido", apuntó una bailarina, dado el habitual éxodo a otras ciudades de los profesionales valencianos en busca de cursos de perfeccionamiento y de aprendizaje.