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FÚTBOL 35ª JORNADA DE LIGA

Reparto de puntos para Europa

Celta y Athletic se acercan más a sus aspiraciones continentales

En un partido a la vieja usanza, duro, apasionado, disputado al límite, el Celta y el Athletic dieron un paso al frente hacia la UEFA. Las lecturas son múltiples: que los bilbaínos no están dispuestos a arriesgar con el señuelo de la Liga de Campeones y que el Celta va a sufrir hasta el último día para cumplir su objetivo son dos de ellas. Que son dos de los equipos más en forma del campeonato es otra evidencia. Otras conclusiones son más domésticas. Así, Irureta comprueba que cuando se sale del guión el Celta se transforma y pierde su encanto, y también que sus problemas con el gol tal vez hubieran sido otros si Moisés gozara de más oportunidades. El Celta mereció más, pero tal y como se desarrolló el partido, el punto no le dejó mal sabor de boca. Había dicho Luis Fernández que le valía el empate y hubo que esperar hasta el final para comprobarlo, porque a los cinco minutos metió la mano en el despiste táctico del Celta y a partir de ahí lo que tuvo que conservar fue un resultado a su favor. El equipo de Irureta no fue el que acostumbra a ver Balaídos hasta la segunda mitad, cuando Ito se puso a mandar en el centro del campo y regresó el fútbol vertiginoso que cada 15 días se regala en Vigo. Volvió esa sensación de que en casa nada malo le puede pasar al Celta aunque esta vez el empecinamiento defensivo del Athletic dejó el trabajo a medias.

Celta: Dutruel; Óscar Vales (Ito, m

46), Dan Eggen, Djorovic, Berges; Karpin, Mazinho, Mostovoi, Revivo; Sánchez y Cadete (Moisés, m. 57).Athletic de Bilbao: Imanol Etxeberría; Larrainzar, Carlos García, Alkorta, Larrazábal; Ríos; Urrutia (José Mari, m. 65), Guerrero, Alkiza; Joseba Etxeberría y Urzáiz (Jorge Pérez, m. 64) (Ziganda, m. 67). Goles: 0-1. M. 5. Alkiza recupera una pelota del centro del campo, centra para Urzáiz, que cede a Etxeberría, que bate a Dutruel. 1-1. M. 61. Centro de Revivo desde la izquierda que remata Moisés en el área pequeña. Árbitro: Rodríguez Martel. Mostró tarjetas amarillas a Urrutia, Sánchez, Larrazábal, Mazinho y José Mari. Unos 28.000 espectadores en Balaídos.

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Salió el Celta armado hasta los dientes en uno de esos experimentos con que de vez en cuando sorprende Irureta y que no suelen dar gran resultado. El técnico vigués sacrificó a Ito para jugar con dos puntas y se encontró con que cada balón que perdió el Celta en el centro del campo fue una ocasión clara para el Athletic. Así se puso por delante el equipo vasco a poco de empezar el partido, cuando los jugadores del Celta estaban todavía repartiéndose el terreno de juego. Alkiza aprovechó el despiste y metió en el área un balón mortal que Etxeberría convirtió en gol. Y con ese resultado pudo dedicarse el Athletic a defenderse, una faceta que domina.

Fue un partido táctico, el más táctico que se ha visto esta temporada en Balaídos, porque como Irureta, Luis Fernández modificó la fisonomía de su grupo para adaptarse al Celta, con Roberto Ríos metido en la camiseta de Mostovoi y con marcajes prehistóricos en toda la línea de zagueros. Al límite del reglamento -14 faltas hizo el equipo de San Mamés en el primer tiempo frente a solo una del Celta- el Athletic cerró los caminos de los de Vigo. Con todo, hubo antes del descanso ocasiones para los de casa suficientes para empatar el partido, sobre todo cuando a la media hora Cadete le hizo un perfecto globo a la salida de Etxeberría y cuando se lanzó en plancha a rematar su autopase frenó la pelota.

El papel de Roberto Ríos resultó fundamental. Estuvo omnipresente unos metros por delante de la defensa y atascó el ataque del Celta. En esa misma posición, impidió en su día que los de Vigo se clasificaran para una final de Copa en una eliminatoria contra el Betis. Repitió ayer una persecución a Mostovoi similar a la de entonces y anuló buena parte de las opciones del equipo vigués.

Cuando Irureta rectificó el Celta volvió a ser el de siempre. La presencia de Ito en el centro del campo tiene el efecto de multiplicar la confianza de los que tiene por delante. Karpin se desplazó al puesto del lateral derecho pero no tuvo trabajo como defensa porque la segunda parte fue toda para el Celta.

En el renovado Celta de la segunda parte brillaron Revivo y Moisés, que sustituyó a Cadete. No pareció casualidad que entre los dos fabricasen el empate. De Revivo fue el centro y de Moisés el remate. Con el empate en el saco, el Celta vivió sus mejores momentos, pero esta vez no hubo milagro. No se lo permitió el Athletic, que sabe que un punto en Vigo es mucho.

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