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El Cesid controló al menos hasta 1995 la sede de HB en Bilbao con micrófonos y camaras

El Cesid (Centro Superior de Información de la Defensa) controló al menos hasta 1995 sede de Herri Batasuna (HB) en Bilbao, la más importante de la coalición abertzale en aquella época, desde un piso situado enfrente y mediante la colocación de micrófonos ocultos y cámaras de televisión, según diversos documentos a los que ha tenido acceso EL PAÍS. La operación fue bautizada Urbión-Amperio-Arzak y los agentes del Cesid utilizaban nombres clave para identificar a los dirigentes de HB en las transcripciones de las escuchas. Se llegaron a grabar reuniones de su Mesa Nacional.

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En el tercer piso del número 8 de la calle de Astarloa, en Bilbao, a escasos 50 metros del palacio de la Diputación foral de Vizcaya, se encuentra la sede de Herri Batasuna. Durante años, las decisiones y discusiones políticas allí tomadas fueron conocidas por el Cesid. Sus agentes llegaron a acercarse hasta el portal de la sede para hurgar en los kilos de papel de desecho que HB depositaba en bolsas de basura.Según el documento al que ha tenido acceso este periódico, el portavoz de la anterior Mesa Nacional, Floren Aoiz, ahora en prisión, es identificado como Arzak-03; Jon Idígoras, como Arzak-02; la abogada Jone Goirizelaia, como Arzak-20, y el ex europarlamentario Karmelo Landa, como Arzak-45. La relación incluye 46 nombres de dirigentes de la coalición independentista con sus correspondiente claves.

Las tareas de espionaje se centralizaban en el número 5 de la calle de Astarloa, desde el interior de un piso situado frente a la sede. Desde allí, agentes del servicio de inteligencia controlaban las grabaciones realizadas a través de los micrófonos ínstalados en los locales o en los teléfonos con el fin de conocer las actividades y los planes del brazo político de ETA. En ocasiones se utilizaron sofisticados micrófonos unidireccionales, los cuales permiten escuchar conversaciones a distancia, así como otros medios avanzados de espionaje, y se llegaron a fotografiar y grabar en vídeo las reuniones.

Toda esta trama de espionaje se mantuvo activa, como mínimo, hasta 1995. El pasado 31. de marzo se descubrió que el Cesid había intervenido los teléfonos de la sede de HB de Vitoria desde una vivienda del piso superior.

Transcripción

Las conversaciones captadas en la sede de Bilbao eran transcritas textualmente y pasaban a engrosar un informe en el que los agentes añadían comentarios. También se servían de las imágenes grabadas para identificar a los integrantes de la reunión.EL PAÌS dispone de la transcripción de una de las escuchas, la de una reunión celebrada por un dirigente de HB y militantes de su organización juvenil, Jarrai, el viernes 20 de mayo, de 1994 y que fue también filmada.

La nota está firmada por la clave EL JACCTAL M 133, seguida de una firma con rúbrica en la que parece leerse "R. Gonzalo". En ella se indica que "a través de un vídeo sobre el objetivo se ha podido comprobar que entre los asistentes a la reunión transcrita podían estar con toda seguridad, además de Arzak-12 (corresponde, según un listado, a José María Olarra, ex parlamentario y miembro de la Mesa Nacional encarcelado); Mikel Zubimendi (ex parlamentario vasco y antiguo líder de Jarrai que se exilió y reside, al parecer, en Dinamarca); Jon Salaberria (portavoz de Jarrai) y Arnaldo Otegi (actual portavoz de HB y entonces dirigente cualificado de KAS (Koordinadora Abertzale Sozialista).

El espionaje se desarrollaba en conexión con el Cesid en Vitoria y Con el cuartel de la Guardia Civil en Intxaurrondo (San Sebastián), donde se centralizaban las informaciones sobre ETA.

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